Argelia envía armas a Mauritania

Argelia ha aceptado enviar una cantidad indeterminada de armas y pertrechos a Mauritania, a petición de las autoridades de este último país, que consideran factible una agresión armada de Marruecos tras el fallido intento de golpe de estado del pasado día 16. La indiscreción de algunos diplomáticos de la Embajada norteamericana, ante un grupo de corresponsales, ha permitido conocer esa noticia, que no ha podido ser confirmada ni desmentida, en fuentes solventes argelinas.Según los medios citados, un grupo de cuatro aviones de transporte Antonov, de las fuerzas aéreas argelinas, trasladó a la capital maurítana armas y equipos militares, cumpliendo un encargo efectuado por el presidente mauritano, Juna Uld Jaidalla, al secretario permanente del Consejo de Seguridad argelino, teniente coronel Mohamed Larbi Beljeir.

Este alto oficial de las fuerzas armadas argelinas visitó Nuakchot, en compañía de uno de los consejeros del presidente Chadli, el ministro Ahmed Taleb Ibrahimi al día siguiente del fallido intento de golpe de Estado. El jefe del Estado argelino, en un mensaje dirigido a su homólogo mauritano, había ratificadao la disposición de Argelia «a apoyar a Mauritania sin reserva alguna».

Los diplomáticos norteamericanos han puesto de relieve que el envío de armas no se ha visto acompañado de personal militar argelino, a la vez que estiman que, al satisfacer la solicitud de Mauritania, el régirnen argelino ha ratificado su voluntad de consolidar la dirección política mauritana dentro de un contexto particular creado, por lo que en Argel se considera «una actitud condescendiente de París con los autores del fallido golpe».

El Buro Político del Frente de Liberación Nacional argelino había formulado, en su día, un llamamiento a la comunidad africana e internacional, «para que adoptaran todas las medidas necesarias destinadas a salvaguardar la independencia e integridad territorial de Mauritania». Esta formulación justifica, en opinión de diplomáticos occidentales, el supuesto envío de pertrechos militares.

El reforzamiento de la capacidad defensiva de Mauritania, si fuera confirmado, no sería considerado por los argelinos como una medida susceptible de interpretarse como una intervención directa, sino un apoyo logístico para un Ejército que, como el mauritano, por la debilidad de sus efectivos (unos 7.000 hombres de tropa y varios míles de efectivos paramilitares) y la insuficiencia de su equipo defensivo y ofensivo, no puede equipararse en forma alguna al Ejército rnarroquí.

La Liga Arabe, cuyo Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores inició ayer una nueva sesión en Túnez, debatirá sobre la situación creada en la región magrebí, tras los acontecimientos de Mauritania.