El golpe de Estado
Numerosas cartas han llegado a la dirección de EL PAIS sobre el golpe de Estado. Esta primera selección intenta recoger las variadas reacciones que los hechos del día 23 de febrero suscitaron en nuestros lectores.
Sólo unas pocas palabras para explicarque, tras estos recientes acontecimientos, creo que ha quedado bastante claro que la violencia no es (y empiezo a dudar si lo ha sido alguna vez) patrimonio de los jóvenes. Creo que también está de más el decir que las últimas generaciones de españoles, por lo menos la nuestra, son las menos violentas de nuestra historia.
Sin embargo, no deja de ser triste comprobar cómo aún hay, entre nosotros, extremistas que siguen cultivando las semillas de violencia que muchos españoles llevan dentro.
Lo malo de todo esto es que conocemos bien sus intenciones y, mientras miles de españoles pensábamos, no sin un poco de escepticismo, que las cosas empezaban a cambiar, llega este puñado de resentidos y trata de estropear lo poco,conseguido en estos últimos años.
Está visto que este país nunca podrá vivir en paz, al menos, mientras haya gente que lucha contra el progreso./
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