El billete de Metro puede costar 20 pesetas a partir del próximo mes

El billete de metro puede costar veinte pesetas el próximo mes de febrero, en caso de que la Comisión Provincial de Precios apruebe la subida determinada por el Consejo de Intervención de la Compañía Metropolitano en su última reunión. Este incremento en el precio del billete sencillo, que ahora cuesta quince pesetas, será seguido, según las intenciones del Consejo, de otra subida en el mes de julio, ocasión en que se abordará la supresión del billete de ida y vuelta y la creación de un bono-metro cuyo precio sería el mismo que entonces tenga el bonobus.

El Consejo de Intervención de la compañía estudió el pasado 29 de diciembre la posibilidad de incrementar en un 30% la recaudación por venta anual de billetes, con el fin de situarla por encima de los 7.000 millones de pesetas. Esto exigía, según los estudios realizados, subir dos veces las tarifas a lo largo del año.La primera situaría el billete en veinte pesetas, y la segunda, en veinticinco pesetas. La subida, según el primer proyecto, iba unida a la desaparición de los billetes de ida y vuelta y de los festivos y a la aparición de los bono-metro, que, valederos para diez viajes, costarían en la primera reestructuración 175 pesetas, y en la segunda, 220.

La complejidad derivada de la aplicación del nuevo sistema, sin embargo, ha hecho posponer la aparición del bono-metro hasta el mes de julio, por lo que, según parece, la propuesta definitiva del Consejo de Intervención para el próximo mes será la de poner el billete sencillo en veinte pesetas y el taco de diez billetes de ida y vuelta a 320 pesetas.

La propuesta será comunicada, esta misma semana, al gobernador civil, Mariano Nicolás, quien la enviará a la Comisión Provincial de Precios para que la estudie. De no haber oposición, las nuevas tarifas podrían entrar en vigor en la primera quincena del mes de febrero.

El bono-metro se crearía en julio, mes en que la Empresa Municipal de Transportes (EMT) estudiaría, asimismo, subir sus tarifas, ya que, por ahora, se ha descartado un aumento en el precio de los billetes de autobús.

La subida que se haga a mitad de 1981 dependerá, por otra parte, de la situación en la que se encuentre el metro, ya que para julio este transporte podría estar ya en manos del Ayuntamiento y la Diputación. De ser así no sólo sería factible crear un bono-metro, sino que, incluso, se podría crear el billete combinado entre el metro y el autobús como primer paso para lograr un acuerdo metro-EMT-Renfe de cercanías.