10.000 profesores secundaron la huelga de la enseñanza media, según sus promotores

La huelga indefinida, que se inició ayer en los centros estatales de enseñanzas medias, convocada por las asociaciones de catedráticos y agregados de bachillerato y de profesores de teoría de formación profesional, fue secundada por más de 10.000 profesores, según las organizaciones citadas, y tan sólo por 4.500, según datos del Ministerio de Educación, cuyo gabinete de Prensa estima en un 1% escaso la repercusión del conflicto en la plantilla del profesorado de los centros de formación profesional, y en un 12% en la del bachillerato, que está compuesta por unos 36.000 profesores.

Los datos de las organizaciones convocantes fueron facilitados a últimas horas de la tarde de ayer, casi simultáneamente con los difundidos por el Ministerio, en un comunicado de Prensa en el que se afirmaba que «a pesar de la dispersión de los profesores entre más de un millar de centros repartidos por todo el país, de las presiones en contra realizadas por el Ministerio de Educación a través de sus delegaciones provincias y del boicoteo de CC OO, en alianza objetiva con el Gobierno, el paro afecta a más de 10.000 profesores en España».A tenor de los datos de las asociaciones de profesores, las provincias en las que mayor incidencia tuvo la huelga son las de Pontevedra, Salamanca, Murcia, Sevilla y Granada, en tanto que en Madrid el paro habría afectado a 45 institutos y alrededor de 2.000 profesores, y, concretamente, al ciento por ciento de las plantillas de los institutos Herrera Oria, Felipe II, Gabriela Mistral, San Cristóbal de los Angeles y los de Fuenlabrada y Las Rozas.

Por otra parte, las asociaciones convocantes de la huelga aluden en su comunicado a las sanciones económicas que et Ministerio pudiera imponer a los huelguistas, y señalan al respecto que la Audiencia Territorial de Oviedo dictó sentencia sobre un caso análogo, en la que se declaran ilegales estas sanciones, y se condena al Gobierno a devolver el dinero retení do a los profesores que protagonizaron una huelga el año pasado. El criterio de la citada audiencia es que, por tratarse de faltas leves, la sanción tendría que haber sido impuesta por los directores de los centros y no por los delegados provinciales del Ministerio, que fueron los que en aquella ocasión ordenaron las retenciones de haberes de los funcionarios.

Por su parte, el Ministerio de Educación afirmó, a través de un comunicado oficial, que «la región de la huelga en formación profesional ha sido prácticamente nula, alcanzando apenas al 1% del profesorado».

En cuanto a los institutos de bachillerato, según los datos minísteriales, «en veinte provincias la normalidad ha sido absoluta: en ocho ha alcanzado a menos del 5% del total de los profesores. en otras ocho, el número de huelguistas excede el 40% y, en ningún caso se ha sobrepasado el 65%.

«El Ministerio», concluye la nota oficial, «se hace eco del malestar que en distintas asociaciones de padres de alumnos han causado las alteraciones sufridas en el desarrollo de la jornada escolar, e insiste en hacer un llamamiento a la responsabilidad del profesorado, por el grave perjuicio que con esta actitud se irroga al servicio de la enseñanza».

Por otro lado, y en relación con la nota de las asociaciones convocantes de la huelga sobre las sanciones económicas, fuentes oficiales del Ministerio señalaron que la retención de haberes no puede considerarse, en ningún caso, como una sanción a los huelquistas.