Escasa operatividad en las negociaciones del Estatuto gallego
La negativa de los grupos de oposición a negociar, como pretendía UCD, aspectos concretos del texto autonómico redujo ayer a una casi protocolaria lectura de declaraciones de principios la primera sesión de las conversaciones para mejorar el Estatuto gallego.
Los centristas, que propusieron desde el primer momento la formación de comisiones para el estudio de los apartados más conflictivos del Estatuto, acabarían cediendo a las exigencias de sus interocutores -el Partido Comunista de Galicia (PCG), singularmente-, que deseaban una discusión pública y abierta a la Prensa, en la que se delimitasen las posturas de cada grupo. Aceptada esta última propuesta, Manuel Iglesias Corral, presidente de la UCI) gallega, partido responsable de la convocatoria, inició un turno de monólogos, en el que los portavoces de UCD, Partido Comunista de Galicia, PSOE, Partido Galleguista y Alianza Popular reiteraron sus ya conocidas posturas respecto de la cuestión estatutaria gallega.Iglesias recordó, una vez más, el propósito centrista de obtener para Galicia una autonomía plena, «alcanzando los techos máximos permitidos por la Constitución e interpretando, desarrollando y ejecutando el Estatuto con los niveles máximos de competencias de las otras dos nacionalidades históricas». De acuerdo con el compromiso de interpretación que UCD pretende conseguir a través de estas negociaciones, el presidente de la ejecutiva centrista gallega aseguró también que la disposición transitoria tercera «no condiciona a ninguna de las leyes en ella mencionadas el ejercicio previo de las competencias que el Estatuto reconoce a Galicia». Repitió, por otra parte, las ya conocidas tesis centristas, según las cuales la barrera del 3% del censo, impuesta como límite para la obtención de escaños en. el Parlamento gallego, podría ser modificada por este mismo órgano legislativo, tras la aprobación del Estatuto.
Revisión total del texto
Anxel Guerreiro, secretario general del PCG, leyó en su turno un documento de tres fólios, en el que, tras algunas consideraciones generales sobre el proceso autonómico gallego, se propone a las demás fuerzas políticas participantes en la negociación «la reconsideración global del texto actual del Estatuto por la vía de una decisión conjunta Asamblea de Parlamentarios gallegos-Comisión Constitucional del Congreso». Los comunistas, únicos negociadores que proponen la revisión total del texto autonómico gallego, sugieren un «pacto de modificación global», para el que, en su caso, presentarían proyectos de estatutos alternativos. Guerreiro complementó su propuesta pública con la solicitud de reforma de la ley orgánica de Nlodalidades de Referéndum, en el sentido de que Galicia pueda reiniciar su proceso autonómico inmediatamente, si el referéndum resultase negativo en una o varias provincias.Francisco Vázquez, secretario general del PSOE gallego, aseguró que su partido considera las conversaciones iniciadas ayer como ana continuación del proceso negociador, abierto en diciembre de 1979, con la aprobación del Estatuto en la Comisión Constitucional del Congreso. Vázquez dedicó la mayor parte de su corta intervención al análisis de la disposición transitoria tercera del Estatuto, que los socialistas exigen sea suprimida como paso previo a cualquier acuerdo que pueda establecerse.
El galleguista Luis Sobrado y, el portavoz de Alianza Popular, Luis Barreiro, insistirían también sobre esta cláusula -la clave de las conversaciones-, para proponer como solución alternativa la promulgación en Cortes de una ley orgánica delimitadora de competencias. Sobrado, que subordinó su propuesta «a cualquier fórmula jurídica más viable», enumeraría en su turno, al igual que el representante de Alianza Popular, las modificaciones puntuales del articulado del Estatuto que su partido propone.
Tras esta primera toma de contacto, positivamente considerada por todos los participantes en la reunión, las conversaciones se reanudarán, presumiblemente ya en firme, mañana.
Al margen de la negociación en sí, catorce militantes del Movimiento Comunista de Galicia fueron detenidos ayer, cuando, encadenados y exhibiendo pancartas, contestaban, ante el Hostal de los Reyes Católicos, la presencia de partidos de izquierda en las conversaciones.
