El Ejército polaco amenaza con intervenir si prosiguen los conflictos laborales en el país

El Ejército polaco ha amenazado con intervenir si continúan los disturbios laborales en el país, a través de un artículo en el órgano del Ministerio polaco de Defensa, Zonierz Wolnosei. Este rotativo señaló que los soldados no permanecerán impasibles ante las fuerzas que intentan debilitar la unidad nacional del país.

Esta reacción del Ejército ha sido interpretada como una advertencia indirecta relacionada con los últimos focos huelguistas en tres minas de la Alta Silesia. Precisamente anoche fue alcanzado un proyecto de acuerdo entre los representantes de las autoridades polacas y de los huelguistas.Mientras tanto, según se supo anoche en Varsovia, ha sido creado un sindicato libre y autogestionado de Mazovia (región de la capital polaca) en Ursus.

Según el presidente del nuevo sindicato, Zbigniew Bujak, que trabaja en Ursus -barrio periférico al sur de Varsovia-, la decisión de crear un sindicato libre fue adoptada en el curso de una reunión en la que participaron representantes de empresas de la región.

Entre tanto, en la zona de Gdansk continúan organizándose los nuevos sindicatos libres. En esta tarea participará el líder del Comité para Autodefensa Social (KOR), Jacek Kuron, según han afirmado militantes de este movimiento.

El periódico Zonierz Wolnosci, a través del cual se ha expresado la amenaza de intervención militar, afirmaba en la edición que se difundió ayer que «si la actual situación parece preocupante es precisamente porque algunos círculos políticos en el mundo quieren aprovecharse de las circunstancias y están en contra de Polonia».

La misma publicación afirma que durante las últimas semanas «elementos antisocialistas han intentado infiltrarse en las plantillas de algunas empresas y han encontrado eco incluso en los comités de huelga».

En Moscú, la ayuda económica que la Unión Soviética concedió el miércoles a Polonia ha sido interpretada entre los observadores occidentales como un claro intento del Kremlin de acelerar lo más posible la resolución de una crisis que le preocupa, principalmente porque aún no están claras todas las implicaciones que pueda tener.

Los soviéticos temen por las consecuencias políticas del movimiento huelguístico del país vecino y de las concesiones que se ha hecho al movimiento obrero, pero les preocupa sobre todo la situación económica polaca.

Así, al conceder esta ayuda económica a Polonia, de la que se desconoce la amplitud, pero se sabe que servirá para que los polacos compren a los países occidentales materias primas, el Kremlin intenta controlar el desarrollo económico de este último país.

Investigación sobre el ex director de la RTV

Ayer, el Buró Político del Partide Obrero Unificado de Polonia (POUP) constituyó una comisión investigadora encargada de «examirlar los reproches dirigidos contra Maciej Szczepansk, ex director del comité de Estado para la radio y la televisión».

Después de que Szczepariski fuera cesado de su cargo en el pleno del comité central del POUP, celebrado el pasado 24 de agosto, circuló por los medios cercanos a la radiotelevisión un inventario de su fortuna.

Después del cambio de su máximo dirigente, la radiotelevisión ha vivido una sensible liberalización, informando ampliamente de los últimos acontecimientos.