Entrega de los premios de la V Semana de Cine de Melilla

Los largometrajes Terror en Amityville, de Stuart Rosenberg; El jinete eléctrico, de Sidney Pollack, y Cría cuervos, de Carlos Saura, y el cortometraje Sandra con amor, de Alvaro Sáenz de Heredia, recibieron los premios Anfora de Oro de la V Semana de Cine Internacional de Melilla, correspondientes a las secciones de parapsicología, cine extranjero, cine español y cortometrajes.

El jurado de esta edición estuvo formado por Rafael Gil, presidente; Pascual. Cebollada, Armando Caranci y Juan Guerrero Zamora, vocales, y Manuel Requena, secretario. Del 26 al 31 de mayo, con cuatro sesiones diarias, celebradas en el teatro cine Nacional, más de veinte películas se repartieron en los distintos certámenes, que incluía uno específico sobre parapsicología, con conferencias de especialistas previas a las proyecciones. El público llenó casi todas las sesiones, a cien pesetas la entrada, y siguió con interés la programación de la Semana, que incluía películas ya conocidas en las últimas temporadas, de calidad intermedia y con atractivo comercial, siendo el único estreno nacional la española Los mil pedazos, de Carlos Puerto. Este mismo director presentó en el ciclo de parapsicología La capilla ardiente lo que provocó el definitivo despiste sobre sus intenciones cinematográficas.En el acta del jurado se hizo constar la valoración temática y artística de las películas ganadoras de las Anforas de Oro, símbolo de la ciudad. La norteamericana Terror en Amityville, de Stuart Rosenberg, premiada entre las concursantes al ciclo de parapsicología, «por la perfecta adecuación del tema al ciclo en que se contiene y en consideración a sus valores técnicos». En este cielo habían participado La campana de cristal, de Larry Peerce; La capilla ardiente, de Carlos Puerto; El legado, de Richard Marquand, y los documentales Recuerdo del futuro y regreso a las estrellas, de Harald Reinl, sobre las investigaciones del equipo de Erick von Daniken, y El testigo mudo, de David Roof, reportaje basado en la Sábana Santa que se conserva en la catedral de Turín, película que, según los especialistas, se aproxima más a las interpretaciones paranormales.

Conferencias de expertos

Este ciclo reunió en Melilla a una serie de especialistas españoles que pronunciaron, en la sesión de noche, conferencias sobre algunos temas relacionados con la parapsicología. Las sesiones fueron dirigidas por Antonio José Alés, presentador y director del programa Medianoche Cadena SER, quien habló sobre Al otro lado de la vida humana. También participaron Miguel Hernán, estudioso de la Biblia, sobre El futuro está escrito; Germán de Argumosa, sobre el tema específico de las psicofonías; Antonio Ribera, uno de los primeros escritores sobre los platillos volantes, quien se refirió a la vida en Marte, y Nadia Henche y el sacerdote jesuita José María Pilón, dedicados a la divulgación de las teorías y ensayos sobre el Santo Sudario. Excusaron su asistencia Fernando Jiménez del Oso y Juan José Benítez. Este último envió un telegrama donde decía que iniciaba un viaje para investigar un caso de ovni relacionado con el presidente Suárez.En el ciclo de cine español, Cría cuervos, de Carlos Saura, obtuvo el mayor número de votos de los espectadores, en competencia con Las palabras de Max, de Emilio Martínez Lázaro; Con los ojos vendados, de Saura; A un dios desconocido, de Jaime Chávarri, y Los mil pedazos, de Carlos Puerto.

De la película norteamericana El jinete eléctrico, de Sidney Pollack, el jurado destacó la exaltación «de dos valores fundamentales y permanentes, de gran vigencia actual, como son la libertad individual y la ecología, expresados en un lenguaje específico de cine puro». En el ciclo extranjero se pasaron películas como Desesperación, de Fassbinder; Z, de Costa Gavras; El campo de cebollas, de Harold Becker; Cowboy de medianoche, de ShIesinger; Las fuerzas vivas, de Alcoriza; Ratataplan, de Nichetti; La barrera, de Jristov, y Prostituta de día, señorita de noche, de Chabrol.

En cuanto al cortometraje Sandra con amor, de Alvaro Sáenz de Heredia, el jurado justificó el premio «por la importancia social, por la actualidad del tema y su alegato contra la violencia, expresado objetivamente en una historia contada con naturalidad ». A esta sección se presentaron cortos de Luis Mamerto López-Tapia, Angel Peláez, Tote Trenas, Jesús Terrón, Fernando Trueba y Eduardo R. Campoy, realizados en los últimos años.

Premios especiales

Además de las Anforas de Oro, el jurado concedió premios especiales a Lo que el viento se llevó, de Fleming (votada por 2.500 personas en una encuesta pública), Cowboy de medianoche, de Shlesinger; Luis Alcoriza, mejor dirección; y Jane Fonda y Dick Bogarde, mejores intérpretes.Los premios fueron recogidos, en la sesión de clausura celebrada el pasado sábado, por las actrices Nuria Torray, María Salerno, Paca Gabaldón, Belinda Corel, Blanca Estrada y Mercedes Vecino, la más aplaudida por sus paisanos melillenses. En el acto, el director general de Cinematografía, Carlos Gortari, agradeció el entusiasmo del público por su respaldo al cine y expresó su alegría por el premio a la película de Carlos Saura, «importante para que tengamos fe en nuestro cine» y poder pedir al Gobierno todas las ayudas necesarias para el cine español. Hizo una referencia al premio de cortos a Alvaro Sáenz de Heredia, hijo del director José Luis Sáenz de Heredia, con la presencia de la segunda generación de directores españoles.

Tanto el Ayuntamiento de la ciudad como la comisión organizadora de la Semana, que tiene un presupuesto municipal de tres millones, manifiestan que se cumplen los objetivos del certamen: promocionar Melilla y ofrecer buen cine. A lo largo de las intervenciones públicas se ha insistido en «la españolísima Melilla». Unos cincuenta invitados asistieron a actos de la Semana de las Fuerzas Armadas, el sábado legionario, una excursión a las islas Chafarinas y otros actos sociales llenos de cordialidad.