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Marcelino Oreja recibió en Madrid al ministro de Información saharaui

El Frente Polisario informó ayer en la capital argelina del encuentro celebrado el pasado viernes en Madrid entre el ministro español de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, y el ministro saharaui de Información, Salem Uld Salek. La entrevista, según el escueto comunicado saharaui, habría tratado «sobre las relaciones bilaterales la situación en la región ».El embajador español en Rabat Alfonso de la Serna, fue llamado ayer por el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Mohamed Bucetta, quien le pidió explicaciones sobre la entrevista Uld Salek-Oreja.El representante diplomático español, consultado por EL PAIS, se negó a dar detalles sobre la entrevista, pero la radio de Rabat señaló que España no había modificado su postura, remitiéndose al comunicado hispano-marroquí firmado en Fez en junio de 1979.

El Polisario mantiene en Argel un estricto hermetismo sobre el contenido de esta entrevista, que, según fuentes generalmente bien informadas, se habría producido a iniciativa del movimiento independentista, dentro del contexto de la campaña diplomática que éste viene realizando de cara a la próxima cumbre africana que debe celebrarse en julio en Sierra Leona.

En la actualidad, la República Arabe Saharaui Democrática (RASD) dispone ya del reconocimiento diplomático de veintitrés países africanos. Se da por descartado que en Sierra Leona alcance la mayoría necesaria para entrar en la OUA como miembro pleno.

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El Polisario pide a España gestos concretos

Viene de primera páginaEsta situación implica, según el Polisario, la necesidad de que la diplomacia española, que en sucesivas ocasiones ha reiterado su disposición a respetar las decisiones de los organismos internacionales sobre el conflicto del Sahara occidental, se defina en función de las nuevas coordenadas diplomáticas.

La delegación saharaui encabezada por Salem Uld Salek, habría evocado también el estatuto actual de la representación del Frente Polisario en la capital española. El movimiento saharaui ha puesto de relieve en varias ocasiones que consideraba necesario que su delegación dispusiera de las facilidades y prerrogativas que corresponden al nivel de su delegación. La salida de Ahmed Bujari, actual embajador de la RASD en México, de Madrid fue interpretado en Argel como una respuesta del Polisario al «poco interés» que habría mostrado el Gobierno español ante tales requerimientos.

Cierto es que la delegación del Polisario en Argel y la representación diplomática española en esa capital han mantenido contactos esporádicos que la discreción de unos y otros los había calificado como «iniciativas de carácter personal».

En la capital argelina la entrevista Oreja-Salek, preparada desde hace dos semanas, ha sido considerada con pronunciado interés por los medios oficiales, aunque se han negado a comentarla. La importancia del gesto español vendrá dada, según se dice en Argel, por los resultados prácticos del encuentro, mientras por otra parte se da a entender que en la entrevista no habría figurado el tema de una supuesta iniciativa política española para resolver la crisis del Sahara, sino aquellos puntos que conciernen «a una clarificación de la situación actual entre las dos partes».

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