Huelga general en Hernani y funerales por el simpatizante de HB asesinado
En un ambiente de crispación y nerviosismo mal contenido, Hernani vivió ayer la tercera jornada consecutiva de huelga general, como protesta por el atentado que costó la vida en la madrugada del sábado al simpatizante de Herri Batasuna Felipe Sagarna Ormazábal. Sólo permanecieron abiertos ayer los establecimientos de alimentación durante las primeras horas de la mañana, para permitir a los hernaniarras efectuar compras de primera necesidad. Para hoy, martes, varias organizaciones políticas de izquierda radical, entre ellas HB, convocan huelga general en Guipúzcoa.
También ayer, en Cegama, se produjo una completa paralización de la actividad laboral, apoyada por el ayuntamiento, para protestar por la situación de dos vecinos, que tras haber permanecido cinco días incomunicados en aplicación de la ley Antiterrorista, han sido puestos en libertad.En un pleno celebrado en la tarde del lunes, el Ayuntamiento de Hernani acordó, por unanimidad, condenar el atentado contra Felipe Sagarna, exigir la retirada de las FOP del País Vasco, formar una comisión investigadora para el esclarecimiento de los hechos y dedicar una calle a la víctima. Un punto de las conclusiones criticando las declaraciones del general Saenz de Santamaría ante el Congreso, y afirmando que contribuyen a justificar atentados como el de Hernani, fue aprobado por los corporativos de HB, PNV y EE, con el voto en contra de los del PSE (PSOE).
Alrededor de 5.000 personas asistieron el domingo en Hernani al funeral de Felipe Sagarna, celebrado en el atrio de la iglesia de san Juan Bautista. El sacerdote que pronunció la homilía destacó la personalidad alegre y vitalista del fallecido y dijo que su asesinato es una ofensa al pueblo de Hernani, aunque no lograría hacerle perder los nervios. Terminado el oficio religioso, se retiraron los celebrantes y el grupo musical al que pertenecía Sagarna Ormazábal interpretó el Agur jaunak.
Concluida la inhumación de los restos mortales en el cementerio, varios miles de personas asistieron en la plaza Mayor a una asamblea en la que se leyeron escritos de partidos políticos condenando el atentado con términos especialmente duros. Telesforo Monzón tomó la palabra y calificó a Sagarna de «nuevo mártir». Visiblemente emocionado, el líder de la coalición independista renovó públicamente el juramento de los parlamentarios de HB en víspera del Aberri Eguna, asegurando que no abandonará la lucha hasta la completa liberación de todas las regiones de Euskadi.
En la misma asamblea, un miembro de las gestoras pro aministía informó del hallazgo de dos pistolas, varias pelucas y un par de esposas en el automóvil de un guardia civil que había sido volcado e incendiado durante los incidentes registrados en la noche del sábado. Los hechos se produjeron cuando grupos de personas persiguieron por las calles a guardias civiles de paisano, que efectuaron disparos intimidatorios en varias ocasiones.
Uno de los guardias civiles, alcanzado por sus perseguidores, resultó contusionado y quedó en observación en la sección de traumatología de la residencia sanitaria. Poco después efectivos de la Guardia Civil de uniforme y de paisano desalojaron la plaza del pueblo, disparando ráfagas de metralleta y efectuando controles de vehículos en las calles.
Por otra parte, grupos de manifestantes colocaron barricadas en los accesos por carretera a Hernani y en la vía férrea paralizando el tráfico desde las nueve de la noche del domingo. Varios trenes, entre ellos el Talgo, no pudieron llegar a San Sebastián. Aunque la policía logró despejar las vías al mediodía, por la tarde los manifestantes bloquearon de nuevo el tráfico ferroviario.
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