García Salve dice que su condena es un ejemplo más del retroceso de las libertades

«Creo que el país va hacia atrás y las fuerzas menos democráticas están aprovechando el momento», ha declarado Francisco García Salve, dirigente de CCOO y miembro del comité central del Partido Comunista de España, condenado por la sección primera de la Audiencia Provincial de Madrid a un total de tres años y cuatro meses y multa de medio millón de pesetas, por su libro Yo creo en la clase obrera. El libro fue publicado en octubre de 1977 y secuestrado por el ministerio fiscal por denuncia del Ministerio de Cultura.«El hecho de que no se me aplique la amnistía por delitos de intencionalidad política cometidos hasta el 6 de octubre de 1977 porque el depósito del libró se realizó el 18 de octubre demuestra la tacañería de algunos sectores, concretamente del judicial», añadió. «Es evidente que no soy el impresor del libro ni quien hizo el depósito. Yo lo escribí y esto lo hice antes del 6 de octubre. Me solidarizo totalmente con el magistrado del Supremo, que declaró recientemente la escasez de individuos demócratas en el aparato judicial.»

«En mi libro», añadió García Salve, «no ofendo personalmente a nadie. Es un libro básicamente autobiográfico en el que se vierten ideas acerca del Partido Comunista de España, de Comisiones Obreras y del movimiento sindical. En definitiva, es un ejemplo más del retroceso que vive el país en la libertad de expresión, a sumar a lo de El crimen de Cuenca y a los numerosos procesos que se siguen contra los periodistas. Ahora tengo pendiente otro proceso por el que se me pide seis años y un día por un artículo publicado en agosto de 1978 en El Imparcial. »

CCOO ha elaborado un comunicado en el que denuncia el caso de García Salve como parte del retroceso en las libertades democráticas.