Acuerdo entre Moscú y Kabul sobre las tropas soviéticas en Afganistán

La firma de un acuerdo soviético-afgano sobre la estancia «provisional» de tropas soviéticas en Afganistán suscitó, en la noche del viernes al sábado, una reacción del Departamento de Estado, que la calificó de pura «operación de propaganda».El comunicado de la agencia soviética Tass, que anunciaba la conclusión de un acuerdo sobre problemas «prácticos referentes a las condiciones de residencia en los territorios de Afganistán de un contingente limitado de tropas soviéticas», fue difundido al término de una ronda de conversaciones entre los ministros soviético y afgano de Asuntos Exteriores, Andrei Grorniko y sha Mohamed Dost.

Los observadores diplomáticos en la capital norteamericana señalan, sin embargo, que el comunicado de la agencia Tass no especifica si los dos ministros discutieron la duración de la estancia en Afganistán de las fuerzas soviéticas.

Por otra parte, las declaraciones de Gromiko subrayando el interés que presta la URSS a una solución política del caso afgano, siempre y cuando el Gobierno de Babrak Karmal sea mantenido, no ha suscitado ninguna reacción oficial.

Sin embargo, EEUU estima que la única condición indispensable para un eventual intento de solución política a la crisis provocada por el «golpe de Kabul» es la retirada total de las fuerzas soviéticas.

Por otra parte, el comunicado conjunto rumano-británico publicado al término de la visita de tres días a Rumania de lord Carrington, secretario del Foreign Office, revela, en opinión de los observadores, una cierta convergencia de los puntos de vista de Londres y Bucarest sobre el problema afgano.

El texto publicado por la agencia rumana Agerpress constata que «el deterioro de la situación internacional es la consecuencia de políticas basadas en la fuerza y en la violación de la independencia de Estados, así como del desprecio del derecho de los pueblos a disponer de sí mismos».