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Más de la mitad de los madrileños sufren enfermedades producidas por el ruido

El ruido es el agresor número uno de la salud, y, como consecuencia de ello, más de la mitad de la población madrileña sufre enfermedades producidas o agravadas por el alto nivel de contaminación ambiental de esta ciudad, según se puso de manifiesto en una mesa redonda celebrada en la facultad de Económicas de la Universidad Autónoma, en la que se intentó analizar y exponer la situación en la que Madrid y parte de la provincia se encuentran en estos momentos.Los asistentes al acto fueron el psiquiatra Enrique González Duro, los alcaldes de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes, Carlos Muñoz y Adolfo Conde, respectivamente, el concejal madrileño de Medio Ambiente, Manuel Mella, dos representantes de la Asociación Española de Pilotos y otros dos miembros del gabinete de salud de CCOO. La intervención más documentada sobre los efectos del ruido en el ciudadano man total de 130 empresas, con 60.000 trabajadores, cuya situación sanitariadrileño corrió a cargo de Angel Cárcoba, de CCOO, quien informó de que de u conocen y controlan, la causa de las denuncias más repetida -un 60%- se debe a que en ellas se sobrepasa el nivel medio de decibelios que permiten las ordenanzas

El psiquiatra González Duro sugirió en su intervención que si el ruido estimula la capacidad de trabajo (por un proceso de tensión nerviosa-irritabilidad-descarga-aumento de rendimiento), las empresas no serán las más interesadas en disminuir el nivel medio de ruidos.

Manuel Mella, concejal responsable del Medio Ambiente, señaló que Madrid sufre todas las fuentes de ruido conocidas, y que la situación actual no se puede desligar del desarrollo desordenado de la ciudad. Dijo que la fuente fundamental del ruido es el tráfico y que el mayor número de denuncias formuladas por el ciudadano va contra las industrias pequeñas ubicadas en viviendas (2.000 el pasado año).

Añadió que la actual ordenanza sobre ruidos, de abril de 1969, es incompleta y que va a ser modificada, y anunció que el Ayuntamiento prepara una campaña de concienciación ciudadana para rebajar el nivel del ruido.

Aeropuerto de Barajas, pesadilla de algunos pueblos

Los alcaldes de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes coincidieron en su intervención, al señalar que el despegue y aterrizaje de los aviones del aeropuerto de Barajas es una constante pesadilla para los habitantes de sus respectivos pueblos.Ambos alcaldes denunciaron también la irracionalidad con que se ha permitido el crecimiento de estos pueblos, por considerar que un planeamiento urbanístico lógico nunca permitirá levantar viviendas junto a puntos tan ruidosos como un aeropuerto.

Carlos García Rodrigo, portavoz de la Asociación de Pilotos, manifestó su extrañeza ante el hecho de que los cristales y chimeneas de pueblos como Alcobendas resistan el ruido que producen los aviones. Afirmó después que los encargados de pilotar un avión pueden disminuir el ruido según los procedimientos que utilicen en sus operaciones. Anunció que, a partir del 1 de abril, todas las tripulaciones tendrán que aplicar unas normas «antirruidos».

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