Larroque: "Canorea está por encima de Taurina Hispalense"

Luis Laroque, diputado visitador de la plaza de toros de Las Ventas, dio a conocer, mediante una conferencia de prensa, las líneas maestras de la Diputación con respecto a la política taurina en Madrid y su provincia. Entre otros temas, trató sobre la cesión de Canorea como arrendatario de Las Ventas a Taurina Hispalense, sobre la importancia que las condiciones de cesión tienen en el futuro de la política taurina y, por último, sobre las funciones del Consejo de Administración de Asuntos Taurinos creado por la Diputación.En cuanto a la cesión de Diodoro Canorea de sus derechos como arrendatario a nombre de Taurina Hispalense, señaló Larroque que es algc perfectamente legal: «Según la cláusula undécima del pliego de condiciones, la empresa arrendataria puede ceder a terceros el contrato de arrendamiento, previa autorización de la Diputación en pleno y siempre que el arrendal ario. es decir, Canorea. siga siendo responsable ante la Diputación del cumplimiento del contrato. Nosotros no conocemos al señor Berrocal», continuó Larroque; «para nosotros, el único interlocutor válido es Canorea.»

« Durante el año 1979 no aceptamos la cesión a nombre de Taurina Hispalense porque ésta no se había dirigido a la Diputación de manera formal y el conceder la cesión a nombre de la persona jurídica entendíamos que era ponernos en sus manos.» No es lo mismo, argumentó Larroque, una cesión a las personas físicas. «No obstante, para nosotros, Canorea está por encima de Taurina Hispalense en relación con la Diputación.»

«Las condiciones que hemos puesto a Taurina Hispalense para aceptar la cesión nos parecen el punto clave y esencial de cara a velar por la pureza y la promoción de los toros en Madrid.» La Condición cuarta es vital. A partir de ahora, el incumplimiento por parte de Taurina Hispalense de cualquier aspecto del contrato, del pliego de condiciones o del vigente reglamento taurino es causa automática de rescisión del contrato. Además, afirmó Larroque, estas condiciones no son negociables. Si el día 10 de febrero Taurina Hispalense no las firma, se procederá a rescindir el contrato.

En el caso de llegar a esta decisión, siguió informando el diputado visitador, el Consejo de Administración de Asuntos Taurinos decidirá bien un nuevo concurso -subasta con nuevas condiciones económicas-, bien un concurso, no subasta, atendiendo a las mejores condiciones ofrecidas, o, por último, la gestión directa. «Nuestras preferencias van, desde luego, por la gestión directa; pero para ello queremos, en primer lugar, ver si estamos preparados; en segundo lugar, cumplir todos los compromisos con los arrendatarios; en tercer lugar, tener formado un equipo adecuado para la gestión, y por último, el consenso de los tres partidos que forman la Diputación. »

Por otra parte, se preguntó a Luis Larroque qué ocurriría en el caso de que se aceptaran las condiciones, pero no se pagara el aval bancario correspondiente a la mitad del canon del año 1980, que debe ser presentado antes del 6 de marzo. «Nosotros asumimos el riesgo de lo avanzado de la fecha para proceder a nueva subasta, pero trataríamos de poner en marcha la gestión directa.»