Argelia e Irak participarán en la "cumbre" de Islamabad

Argelia e Irak, dos de los cinco Estados del frente de la firmeza, que se oponían a participar en la conferencia islámica convocada el día 26 de enero en Islamabad, para tratar la intervención soviética en Afganistán, acordaron ayer bruscamente responder favorablemente a la convocatoria, según señalan fuentes dignas de crédito.La decisión argelina constituye una de las primeras indicaciones aparentes del desarreglo que causan en este país los acontecimientos afganos. Tras la actitud descaradamente prosoviética de los medios informativos argelinos en el tema, los dignatarios del régimen parecen haber situado las cosas en su lugar y dado a entender, de manera concluyente, que la abstención argelína en la votación de la Asamblea General de la ONU sobre Afganistán no debe ser interpretada ni como un alineamiento con Moscú ni como una justificación de la intervención soviética.

La primera indicación de que el régimen argelino ha decidido adoptar una actitud consecuente con sus principios islámicos fueron las declaraciones del jefe de la diplomacia de este país, Mohamed Benyahia, en París, en las que resaltaba que Argelia, aunque no deseaba dar publicidad a su posición sobre la crisis afgana, esto no significaba en modo alguno que hacía suyas las justificaciones de la URSS.

El envío a la capital paquistaní del ex ministro Kassin constituye una reafirmación del deseo del régimen argelino de demostrarque la intervención soviética ha causado un verdadero dilema a los países árabes y por ello está justificada la fisura creada en el frente de la firmeza, integrado por tres países que no acudirán a Islamabad: Siria, Libia y Yemen del Sur y la OLP.

Hasta ahora, sin embargo, sólo Yemen del Sur ha declarado que no participará oficialmente. La decisión adoptada por Argelia está cargada de interrogantes y abre una situación de expectativa en sus relaciones con la Unión Soviética, quien, al parecer, no ha dejado de presionar últimamente para obtener el apoyo del régimen argelino a la intervención en Afganistán.

El frente de la firmeza había señalado que el orden del día de la conferencia islámica debía comprender no sólo la crisis afgana, sino los demás temas que afectan a la comunidad árabe.