Arabia Saudí permanecerá fiel a Washington

«Somos fieles a nuestra amistad con norteamérica, aunque nada nos obliga a ello, ya que se nos brindan numerosas alternativas en los planos militar, tecnológico o económico. Existen muchos países que, como Estados Unidos, están dispuestos a proveernos de todo lo que necesitamos», dijo el príncipe Fahd, heredero al trono saudí en declaraciones a la revista árabe Al Hawadees.

Estos países, precisa el príncipe, son, «en la práctica, todos los europeos con capacidad industrial, tecnológica y en el campo de la defensa».

Refiriéndose al tema del petróleo, el príncipe -que es también primer vicepresidente del Consejo de Ministros- dice que «el petróleo es una materia prima básica, de la cual depende, no solamente nuestra propia existencia, sino la de muchos otros pueblos. En consecuencia, debemos preservar este asunto de cualesquiera tendencias desordenadas, ya que, de lo contrario, perderemos el control del problema».

En cuanto a la persistencia en utilizar el dólar como moneda de cambio, el príncipe heredero da esta explicación: «Todo el mundo sabe que los fondos saudíes, al igual que los de otros países petroleros, están colocados en dólares. ¿Qué ganaríamos con exponer el dólar a una caída?»

El príncipe acusa a «los círculos sionistas, que tratan de emponzoñar las relaciones de Estados Unidos, no solamente con Arabia Saudí, sino asimismo con todos los países árabes que están en buenos términos con Norteamérica».

Respecto al problema palestino, afirma: «Sostenemos, con todos nuestros medios, los legítimos derechos del pueblo palestino, y su combate por recuperar una patria y el retorno de la Jerusalén árabe bajo autoridad árabe».

En cuanto a las relaciones Irán-Arabia Saudí, insiste en que ambos países se encuentran en la misma región, «y ni a los intereses iraníes ni a los nuestros conviene que existan desacuerdos entre nosotros, tanto más cuanto que el nuevo régimen de Irán enarbola el estandarte del Islam, que es también el de Arabia Saudí».

Por último, aludiendo a la manera como despilfarran el dinero en Europa algunos potentados saudíes, el príncipe dice textualmente: «Es intolerable». y «vamos a tomar medidas que se aplicarán contra todos aquellos que atenten a la reputación de nuestro país».