Afganistán y otros precipicios
«Ni Estados Unidos ni otras potencias principales de la OTAN tienen autoridad moral para reprochar a la Unión Soviética su intervención militar en los asuntos internos de Afganistán. Ahí está la Historia, comprendida la más reciente, para desautorizarles.Podemos alzar la voz quienes siempre lo hemos hecho, venga de donde venga la intervención. ( ... )
Y decimos ¡NO! a la intervención de fuerzas militares soviéticas en Afganistán, desde una postura de clase y revolucionaria. Porque la liberáción de los pueblos del imperialism o es obra de los pueblos mismos que lo sufren o sirve de pretexto para las pugnas de los grandes bloques y potencias, además de alimentar las maniobras del imperialismo, que se camufla, como está sucediendo con motivo de los acon tecimientos de Afganistán, en defensor de la no injerencia en asuntos ajenos.
Lo decimos, al mismo tiempo, porque las pugnas de los bloques están poniendo de nuevo al mundo al borde del precipio, ¡ellos!, "marines" y paracaidistas yanquis situados en el golfo Pérsico, en espera de la orden de Washington para saltar sobre Irán. Misiles norteamericanos de alcance medio en fase de instalación en Europa Occidental. Armamento igualmente norteamericano "vendido" a Marruecos para sostener el sojuzgamiento del Sahara y amenazar a Argelia. Desde hace unos días, fuerzas militares soviéticas en Afganistán. Y la OTAN, no insensible, sino cómplice de las intervenciones militares en países del Africa negra, "estudia" represalias.
La dinámica de las estrategias al borde del precipio se ha puesto en marcha. Las grandes poteacias mueven sus piezas aceleradamente para ocupar posiciones. Posiciones bélicas, contrarias a la paz, al desarme, a la desnuclearización. Contrarias a los intereses de los pueblos y la Humanidad. »
3 de enero
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