"El régimen de la Unión Soviética está basado en la mentira"

«La meta real de los disidentes rusos es desenmascarar el mito soviético, el régimen de la URSS, basado en la mentira», afirmó ayer el disidente ucraniano Leónidas Pliucht, invitado por la sección española de Amnistía Internacional.Al patrocinó ayer un acto en el Ateneo de Madrid sobre la violación de derechos humanos en la URSS y Guatemala, con la presencia del mencionado disidente y el diputado democristiano español Fernando Alvarez de Miranda, que formó parte de una misión investigadora de esta organización el pasado mes de agosto en el país centroamericano.

El parlamentario español afirmó que la mayor constatación de violación de derechos en Guatemala es la desaparición de personas por motivos políticos y su posterior asesinato «a manos de grupos paramilitares». «Podemos decir», afirmó Alvarez de Miranda, «que en 1979, los asesinatos políticos son del orden de siete a nueve diarios.» Si bien recalcó que la misión de Al constató «que la violencia en Guatemala obedecía a ambos extremos del espectro político».

El diputado centrista agregó que la represión política guatemalteca se ha extendido a terrenos sindicales, como el caso concreto de la multinacional Coca-Cola, donde un huelguista fue muerto.

Con anterioridad al acto público, Pliucht, conocido matemático, hospitalizado en una clínica psiquiátrica soviética durante más de tres años por sus ideas oposicionistas, liberado en 1976 y «marxista» por definición propia, afirmó que la sucesión en el Kremlin «generará una lucha política, pero exclusivamente por el poder, en ningún caso una confrontación ideológica».

Agregó que «hoy no puede hablarse de un ala liberal en el seno del PCUS; eso es algo», añadió, «que los dirigentes soviéticos utilizan en sus conversaciones con líderes occidentales. Es más, puede decirse que en estos momentos hay una tendencia derechista en el Buró Político. »

Pliucht aludió además a una idea de círculos disidentes, en el sentido de celebrar una conferencia europea, paralela a la de Madrid, «con el propósito de insistir en el Acta de Helsinki, en relación con los derechos humanos».

Para Leónidas Pliucht, la «grave situación económica y social» por la que atraviesa la URSS podría desembocar en dos caminos diferentes, «o bien en una liberalización económica, que comparto, por lo que implicaría de liberalización política, o, por el contrario, el afianzamiento en el poder de un equipo tecno-burocrático, que llevaría al régimen hacia una fascistización».

El disidente concluyó al decir que «si acaso se está esbozando, la formación de un partido socialdemócrata ruso (él se entrevistó ayer con el dirigente del PSOE Federico de Carvajal) no es como alternativa política, sino un derecho que tenernos».