Faltan normas para impartir la asignatura de Etica

El número de alumnos de EGB que en los centros estatales de León han optado por la asignatura de Etica en lugar de la de Moral y Religión Católica es de sólo cincuenta, según estimaciones de los padres de alumnos, que han anunciado la posible creación de una «coordinadora» para controlarla impartición de la primera de estas enseñanzas.Estas estimaciones, referidas a los ocho centros estatales de EGB existentes en la capital de la provincia, coinciden con los datos provisionales dados a conocer por el Obispado, según los cuales el número de escolares que no recibirán instrucción religiosa representará, en todo caso, menos del 2 % sobre una población estudiantil que supera ampliamente los 70.000 alumnos de EGB en toda la provincia.

El bajo nivel de aceptación de la asignatura creada como alternativa a la religión se achaca, por los padres, a condicionamientos sociales todavía vigentes, entre ellos el temor a que estos escolares se vean discriminados como grupo minoritario en los colegios, y a la inhibición del Ministerio de Elducación sobre los problemas de carácter práctico que plantea la enseñanza de la moral laica.

A los dos meses de comenzado el curso escolar, todavía no existen estadísticas oficiales sobre el número de alumnos que han opta do por una u otra asignatura, ni sobre el profesorado disponible para impartir ambas enseñanzas.

En numerosos, colegios todavía no se han llevado a cabo encuestas entre los padres para decidir el tipo de instrucción que prefieren para sus hijos, y, finalmente, no existe todavía ningún «programa» de estudios que defina el contenido de la asignatura de Etica. Los padres de alumnos, advierten sobre este último punto, que mientras la enseñanza de la religión cuenta con un programa y profesorado muy definido, la enseñanza de la asignatura de Etica continúa haciéndose de forma improvisada, por ausencia de ambas cosas.

Por su parte, el Obispado de León señala que la instrucción religiosa se da absolutamente mayoritaria en la diócesis, con un porcentaje de alumnos superior al 98%, tal como se preveía. En bachillerato, este porcentaje desciende al 93%, según las primeras estadísticas.

Preguntadas sobre la «sorpresa» que ha supuesto, incluso para la Iglesia, la masiva aceptación en la EGB de la instrucción religiosa, las mismas fuentes señalaron que los criterios del Obispado al respecto eran los de que esta cuestión se clarifique cuanto antes, y que «las soluciones de los padres sean cada vez más lúcidas», reconociendo que en este primer curso ha faltado «una campaña de información adecuada sobre el tema». Por último, el Obispado pide que no se produzcan casos de discriminación por la aceptación de una u otra enseñanza, y que el ministerio defina cuanto antes el contenido de la asignatura de Etica en EGB.