Los países industrializados, acusados de exportar la crisis al Tercer Mundo
Los países industrializados de Occidente, denunciados violentamente en el plano político, están siendo acusados en la sexta cumbre de no alineados en La Habana de exportar la crisis económica a los tercermundistas. Las cuestiones económicas, las únicas que pueden unir a las naciones representadas en esta reunión, son objeto de especial atención en los discursos pronunciados por los jefes de Estado en la capital cubana.El torrente de discursos, monólogos de gran carga retórica, demagógica en algunas ocasiones, continuó ayer en el plenario de la cumbre, mientras las comisiones políticas y económicas debaten la declaración final, que en principio debe publicarse el viernes. El proyecto económico de resolución final, elaborado por Cuba, responsabiliza a los países imperialistas de economía de libre mercado de la crisis económica. Este planteamiento de principio es apoyado por bastantes países, mientras que otros tratan de diluir el ataque a los países industrializados.
Hay unanimidad en evaluar el fracaso de los esfuerzos por lograr un nuevo orden económico internacional en el que participen equitativamente los tercermundistas y en calificar de «desesperada» la situación económica de la gran mayoría de países no alineados.
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Los países subdesarrollados plantean un mejor reparto de la riqueza petrolífera
(Viene de primera página)Bastantes dirigentes africanos y asiáticos se han dirigido aquí a los representantes de los países árabes petroleros (la Unión de Emiratos Arabes y Kuwait son miembros del Movimiento) pidiéndoles una transferencia de petrodólares hacia los subdesarrollados y un trato especial en los suministros de petróleo. El presidente de Jamaica, Micha Manley, pidió ayer que los excedentes financieros de las naciones árabes del golfo sean invertidas en los países subdesarrollados.
El presidente iraquí, Saddam Hussein, invitó ayer a los alineados a formar uniones cualitativas y asociaciones de materias primas frente a los países industrializados. Irak insistió también en la creación de un Fondo Monetario Internacional a largo plazo para favorecer a los países «pobres», perjudicados por la inflación, y en la que participen los industrializados. Los desarrollados participarían en este fondo en relación con la inflación anual que están exportando a los subdesarrollados. También se integrarían en el fondo las naciones petroleras no alineadas. (El presidente iraquí recordó que su país ha congelado, en la práctica hasta final de año, sus precios petrolíferos a los clientes con contratos directos a largo plazo.)
Aislamiento de Sadat
Después de la gestión económica, la segunda unanimidad lograda por los no alineados es la condena a Egipto. Ayer, desde el régimen radical de Irak hasta el rey Hussein de Jordania, todos los estadistas árabes presentes aquí condenaron a la paz por separado entre Egipto e Israel y apoyaron la causa palestina, tal como la defiende la OLP.
Saddam Hussein pidió a la conferencia que tome medidas contra el Gobierno egipcio y que «lo castigue en forma moral y efectiva por la conspiración que cometió contra la familia árabe».
El presidente del comité ejecutivo de la OLP, Yasser Arafat, acusó a Carter de acelerar sus planes para quebrar la unidad de la nación árabe y fomentar las guerras regionales en la zona. Después de denunciar a Egipto como gendarme norteamericano en la zona, afirmó que Estados Unidos, mediante sus quinta, sexta y séptima flotas, que rodean Oriente Próximo, y sus fuerzas de intervención ya dispuestas, amenaza militarmente a los árabes y «desearía ocupar nuestros pozos de petróleo»; pero nosotros, los revolucionarios árabes, seremos capaces de defenderlos del imperialismo.
El rey Hussein de Jordania estuvo, como se preveía, más moderado que los dirigentes de Siria o Irak; pero en lo esencial se alineó con sus hermanos árabes, condenó a Israel y apoyó la causa palestina, aunque pidió comprensión para los sacrificios que está haciendo el pueblo egipcio.
Por otra parte, las propuestas palestinas al proyecto de declaración final han sido aprobadas por la comisión política, a pesar de la oposición de Egipto. La OLP afirmó que Israel, después de los acuerdos de Camp David, convirtió en asentamientos a los territorios palestinos ocupados, y propone que, ante la amenaza del derecho de veto de EEUU en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el problema palestino, se pida una reunión urgente de la Asamblea General.
Gibraltar
El presidente d e Panamá, Arístides Royo, apoyó ayer, en un discurso ante el Plenario, la posición española sobre Gibraltar, «insólito residuo colonial en Europa», dijo, y pidió la inmediata apertura de negociaciones con Gran Bretaña para descolonizar rápidamente el peñón. Esta declaración fue acogida con evidente satisfacción por la delegación española.
Los países del Pacto Andino-Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia-, con los que España busca una concertación política y económica (sus cancilleres comieron el martes con Robles Piquer en la embajada española en La Habana), publicaron ayer una declaración de apoyo al movimiento de países no alineados y afirmaron que la integración en este grupo sirve para alcanzar la real independencia de los centros de poder. El Pacto Andino dijo que Latinoamérica puede contribuir a un reordenamiento internacional, dentro del cual tenga plena vigencia el principio de no intervención.
Por último, la nota de respuesta del Gobierno español a Fidel Castro, por sus alusiones a nuestro eventual ingreso en la OTAN, causó cierta sorpresa aquí por su «falta de matiz» entre los observadores, declararon a EL PAÍS fuentes diplomáticas de la delegación española. La representación de nuestro país no tuvo parte alguna en la elaboración de la nota, añadieron las mismas fuentes.
También se opina aquí que el posible viaje de Fidel Castro a España ha quedado seriamente comprometido, después de su alusión en contra del ingreso de Madrid en la OTAN y la dura réplica del Ministerio de Asuntos Exteriores español.
Por último, interrogado por los periodistas sobre el estacionamiento de tropas soviéticas en Cuba, un portavoz cubano se negó a contestar a la pregunta, reiterando así el «no comment» expresado por primera vez oficialmente el lunes pasado.
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