El PC italiano puede contribuir a la estabilidad del Gabinete Cossiga

El Gobierno del democristiano Francesco Cossiga, cuya formación fue forzada por las amenazas de dimisión del presidente de la República, Sandro Pertini, debería normalmente ceder el paso a otro Gabinete a finales de año, cuando se celebre el próximo congreso de la Democracia Cristiana. Pero, opinan algunos observadores, el acercamiento del PCI al Gabinete Cossiga a alargar la vida del recién formado Gobierno.

A este respecto se ha considerado significativa, casi a las veinticuatro horas de la investidura de Cossiga, la entrevista del líder comunista Enrico Berlinguer al semanario alemán Stern, en la cual afirmaba, levantando un polvorín de discusiones, que «una coalición de izquierdas llevaría a Italia a un golpe de derechas de tipo chileno». Días después, en el órgano oficial del partido, Rinascita, Berlinguer volvió a redefinir el «compromiso histórico». El líder comunista prometió al mismo tiempo soluciones muy concretas e inmediatas para resolver la crisis económica del país con la política de la «austeridad».Según Berlinguer, su partido está dispuesto a pedir sacrificios a la clase obrera, pero a condición de que «se realice un compromiso entre quienes piensan sólo en producir cada vez más y quienes, se preguntan que por qué y para quién producir».

Las otras fuerzas de izquierdas han reaccionado con un cierto pataleo a esta iniciativa de Berlinguer.

Muchos observadores han considerado la intervención de Berlinguer como una lanza en favor de la secretaría democristiana de Benigno Zaccagnini, que últimamente se ha encontrado en grave dificultad y hasta con peligro de ser derrotada en el próximo congreso por la derecha del partido.

Nueva petición de extradición de Piperno

La justicia italiana, que considera como un revés el rechazo por Francia de la petición de extradición del líder de Autonomía Obrera, Franco Piperno, reiteró ayer su petición, alegando nuevos cargos.