Falleció Buigas, creador de fuentes luminosas en todo el mundo
El ingeniero catalán Carlos Buigas, creador de la monumental fuente luminosa de Montjuich, falleció ayer en Barcelona a la edad de 81 años. Desde hace aproximadamente un mes y medio el señor Buigas se encontraba hospitalizado aquejado de una insuficiencia renal que posteriormente se complicó con dificultades respiratorias. Carlos Buigas había nacido en Barcelona el 18 de enero de 1898. Hijo del arquitecto Cayetano Buigas -autor del monumento a Colón-, en 1925 construyó las tres primeras fuentes luminosas para el palacio real de Pedralbes. En 1926 realizó las fuentes de la plaza de Cataluña y la del paseo de Gracia.Con motivo de la Exposición Internacional de Barcelona de 1929 Buigas desempeñó una importante función en la preparación técnica del recinto. Así, la avenida de María Cristina se vio iluminada con 116 obeliscos de cristal con tonos cambiantes, intercalados por 42 fuentes luminosas.
Buigas realizó numerosos proyectos para el extranjero. Entre ellos cabe destacar un teatro de agua-luz sobre el Sena, para la Exposición Internacional de París (1937); la gran fuente luminosa de la plaza del Imperio, en Lisboa; el teatro de agua-luz Angelita, en Ciudad Trujillo (México), en 1955, y la fuente luminosa y musical para la plaza de las Naciones Unidas de Casablanca (Marruecos), construida en 1967.
A pesar de su celebridad en todo el mundo -añade Efe-, el prestigioso ingeniero barcelonés llegó a pasar grande apuros económicos. La casa que poseía en Sardañola hubo de venderla en 1970 para pagar deudas, según sus propias afirmaciones. Parece que años atrás el gran ingeniero español, a causa de otra aguda crisis económica, se vio forzado a vender sus medallas y condecoraciones.
En 1969, el Ayuntamiento de Barcelona concedió a Carlos Buigas la medalla de oro al Mérito Artístico. En 1953 el Círculo de Bellas Artes de Madrid concedió al popular ingeniero la medalla de oro extraordinaria, con una leyenda que decía: «A don Carlos Buigas, creador del arte de la luz.» Luego se sucederían los diplomas, condecoraciones y agasajos por parte de instituciones nacionales y extranjeras.
Babelia
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