Tibia contestación de la oposición al aumento de precios energéticos

Las recientes medidas gubernamentales de incremento del precio de los productos energéticos recibieron ayer, en el seno de la Comisión de Industria y Energía del Congreso, una tibia contestación por parte de los grupos parlamentarios de la oposición. En presencia del vicepresidente segundo del Gobierno, Fernando Abril, y del ministro de Industria y Energía, Carlos Bustelo, quienes repitieron algunos de los argumentos facilitados el martes a la prensa, los portavoces de los grupos se limitaron a pedir un mayor ahorro energético, explicaciones sobre la filosofía de los precios o -como hizo el comunista Ramón Tamames- a reivindicar la planificación económica para afrontar la crisis.

Presidió la sesión el titular de la Comisión, Rodolfo Martín Villa, quien agradeció la presencia de los miembros del Gobierno y encuadro la sesión dentro de las reuniones que viene celebrando la Comisión en relación con el Plan Energético Nacional (PEN). La presencia de los periodistas en la sesión suscitó reticencias por parte del señor Tamames y del representante del grupo andalucista, Emilio Pérez Ruiz, por entender ambos que sólo la asistencia de los miembros del Gobierno había provocado el interés informativo, que, según ellos, corresponde a las sesiones dedicadas al estudio del PEN.El ministro de Industria y Energía, señor Bustelo, justificó el aumento de los precios en la decisión adoptada por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en Ginebra, el pasado 28 de junio, y señaló que el Gobierno se había enfrentado con la nueva situación a través tanto del ajuste de precios como del ahorro energético. Declaró que si el Gobierno no hubiera trasladado el encarecimiento de los productos energéticos al consumidor, ello hubiera supuesto una financiación monetaria con resultado de déficit sobre el sector público. Por último, aconsejó que no se dramatizaran las medidas, que encuadró dentro de la política de cuentas claras y de transparencia que sigue el equipo económico del Gobierno.

Abierto el turno de preguntas, Macía Alavedra (Minoría Catalana) se interesó por el procedimiento para realizar las repercusiones del aumento de los precios en los distintos productos y, más tarde, pidió un plan de ahorro energético más drástico por parte del Gobierno. El señor Bustelo detalló, con base en el aumento experimentado por algunos productos el 1 de junio, que los incrementos son similares.

José María Triginer (Socialistas de Cataluña) se interesó por la influencia del aumento de precios sobre el producto interior bruto y preguntó asimismo si se pondría en práctica el estudio de la Comisaría de Energía sobre ahorro energético. El señor Bustelo no contestó concretamente, lo que provocó irritación en el señor Triginer, quien dijo que su grupo no podría apoyar la política energética por falta de datos. El señor Abril intervino para explicar las razones económicas, sociales y políticas del incremento de los precios. Estimó que a través del aumento se iniciaba una política redistributiva que daba paso a una racionalización gradual de los precios de los productos energéticos.

El socialista Miguel Boyer estimó que la OPEP había sacado al Gobierno de un atolladero político y reconoció que se había mejorado la estructura de los precios. Por su parte, el señor Tamames declaró que no se trataba de un problema de coyuntura, sino de plazo medio y largo. Criticó el desprecio hacia el estudio de alternativas energéticas, pidió una política exterior que favorezca nuevos enlaces y aseguró que la inflación no se puede solucionar con medidas monetarias.

El centrista José María Martín Oviedo se mostró de acuerdo con el realismo y la urgencia de las medidas y pidió la concordancia del Gobierno no sólo con la OPEP sino también con la CEE.