Defensa de los intereses nacionales, programa europeo de los conservadores británicos
Con una reafirmación del europeísmo de su partido y la promesa simultánea de defender a toda costa los intereses nacionales, la jefa del Gobierno británico lanzó ayer en Londres el manifiesto electoral conservador para las primeras elecciones directas al Parlamento Europeo, que se celebran en este país el próximo 7 de junio.
Margaret Thatcher identificó los intereses de su partido en la cuestión europea con los del conjunto de Gran Bretaña y vaticinó un triunfo tory en la línea de las pasadas elecciones generales. Los conservadores, que presentan candidatos en 78 de las 81 circunscripciones británicas (las tres restantes corresponden a Irlanda del Norte, con un sistema electoral diferente) se convertirán, según la señora Thatcher, en el más numeroso grupo político representado en la asamblea de Estrasburgo.Acompañada en la conferencia de prensa por tres pesos pesados de su Gabinete -los responsables de Asuntos Exteriores, Hacienda y Agricultura- la primera ministra ha insistido en que deben ser modificadas la política agrícola comunitaria y equilibrada en favor de Gran Bretaña la actual y desigual contribución al presupuesto anual de la Comunidad Económica Europea. Estos dos son los puntos fundamentales del manifiesto conservador, presentado bajo el lema «para un mejor trato en Europa». Ambas ideas han sido el eje de las pasadas reivindicaciones laboristas, de las que los conservadores no se van a apartar más que en el talante negociador con Bruselas.
Es doctrina de Margaret Thatcher que Gran Bretaña conseguirá mucho más de sus colegas de la CEE por la vía de la flexibilidad amistosa que por la de la confrontación -retórica unas veces, real otras- practicada por el Gobierno del señor Callaghan.
Políticamente, el manifiesto tory descarta la ampliación de los actuales poderes del Parlamento de Estrasburgo y considera necesario el fortalecimiento de la derecha a escala continental para cerrar el camino a una «Europa socialista». Thatcher, que aludió a las dificultades económicas de su partido para financiar la campaña electoral, afirmó que los conservadores no han recibido ayuda económica de ningún organismo o grupo político europeo.
