Costa de Marfil comparte las tesis españolas sobre Canarias

La segunda jornada de los Reyes en Costa de Marfil, marcada, como la anterior, por la calurosa acogida de los nativos, quienes no han cesado de agasajar a la pareja real con sus cánticos y bailes, confirma el carácter protocolario y casi turístico de este viaje africano, dada la ausencia de contenido político en las conversaciones a alto nivel y la falta de acuerdos económicos.

En las Conversaciones del Rey con el presidente Houphouet Boigny y en las de Marcelino Oreja con su colega marfileño se ha confirmado la política de amistad hacia España, puesta de manifiesto en las últimas reuniones de la OUA. El tema de Canarias, que será debatido con toda seguridad en la próxima reunión de la organización africana; en Monrovia, no ha estado ausente en estas entrevistas de alto nivel, y es previsible que Costa de Marfil mantenga su postura de apoyo a las tesis españolas.Por lo que respecta a las relaciones económicas, durante este viaje no se ha llegado a la firma de ningún acuerdo, tan sólo se han estudiado las posibilidades de utilización del crédito de doscientos millones de dólares concedido por España y del que todavía no se ha hecho uso. Se estudia la inversión en una fábrica de celulosa procedente de la caña de azúcar.

Don Juan Carlos y doña Sofía iniciaron su jornada de ayer con una visita al Ayuntamiento de Abidján, donde les fueron entregadas las llaves de oro de la ciudad; don Juan Carlos, en su discurso de agradecimiento, hizo un elogio de las realizaciones de la capital de Costa de Marfil, que en pocos años se ha convertido en una ciudad moderna de estilo europeo, pero con un gran respeto a las zonas verdes y espacios abiertos.

Posteriormente Sus Majestades realizaron una visita al puerto de Abidján en una lancha motora, para continuar con una recepción a la colonia española en la residencia del embajador de España. Cerca de trescientos españoles viven en este país, la mayoría de ellos sacerdotes y religiosas y profesores de español. Durante su recorrido por la ciudad los Reyes fueron constantememente homenajeados en cada esquina por los transeúntes, sin dejar de batir palmas rítmicamente.

Visita a Yamowssokro

Los Reyes almorzaron en privado en su residencia con el presidente marfileño y su esposa, y seguidamente emprendieron viaje por vía aérea a Yamaussokro, pueblo natal de Houphouet Boigny. El recibimiento de la pareja real en el aeropuerto revistió las mismas características de espectacularidad de que fueron objeto el día anterior en Abidján: bailes rítmicos, cantos, grupos que ejecutaban diversas danzas, características de esta región situada en el centro del país y donde conviven más de media docena de razas distintas.Yamoussokro es una ciudad construida hace muy pocos años en el mismo poblado donde nació el presidente marfileño. Es una villa con grandes avenidas, casitas de una planta y una amplia infraestructura de canalización y tendidos eléctricos. Se alza en medio de la selva, con un urbanismo moderno, y los marfileños aspiran a convertirla en el centro administrativo del país.

Los Reyes visitaron el Ayuntamiento de Yamoussokro, y tras recibir las llaves de oro se retiraron a su residencia, un gran palacio construido entre lagos, donde cenaron en privado con sus anfitriones.

En la jornada de hoy, domingo, está previsto visita a las plantaciones agrícolas de la zona, donde se ha realizado un gran esfuerzo de modernización, tras asistir a una misa en la misión de San Agustín. La segunda etapa de su viaje se desarrollará en Guinea Conakry.