Doscientos muertos en el terremoto registrado en Yugoslavia
Alrededor de doscientos muertos y 12.000 personas sin hogar es el balance del movimiento sísmico que asoló, a las 15.45 del pasado domingo, la zona sur de la costa adriática de Yugoslavia, haciendo sentir sus efectos en Albania y Bulgaria.
Antes del gran movimiento sísmico se produjeron al menos treinta temblores de menor intensidad, hasta que se produjo el movimiento telúrico definitivo, de 6,4 grados en la escala de Richter, el mayor ocurrido en. Yugoslavia. El epicentro fue localizado a treinta kilómetros de la ciudad costera de Ulcinj.Aparte de esta ciudad, el terremoto afectó a las poblaciones de Bar, Budva, Kotor y Herceg Novi. Cercano a esta localidad se encontraba en el momento del terremoto el presidente yugoslavo, Josip Broz Tito, descansando en la localidad de Igalo, que experimentó violentas sacudidas de tierra.
Los daños materiales son cuantiosos. Varias aldeas han desaparecido por completo y setenta metros de costa adriática han desaparecido bajo las aguas. Carreteras y líneas de ferrocarril fueron bloqueadas a causa de los desprendimientos de tierra.
Las autoridades de la República de Montenegro, principal afectada por el movimiento telúrico, se apresuraron a coordinar las primeras medidas de socorro y salvamento para la población, en tanto llegaban auxilios procedentes de otras partes del Estado federal.
Tito recorrió personalmente las zonas de Herceg Novi afectadas por el terremoto y solicitó a todo el pueblo yugoslavo solidaridad y esfuerzo común para sobreponerse a la catástrofe y enviar toda la ayuda posible a los damnificados.
Autoridades de Belgrado informaron que se piensa, en principio, contar con los propios medios para los primeros auxilios, pero, que llegado el caso no desestimaría la ayuda extranjera.
Desde las primeras horas de ayer, lunes, cuando se asentó el terreno, tras los típicos seísmos prolongación del terremoto principal se establecieron puentes aéreos desde todos los puntos de Yugoslavia con ropas, alimentos y medicinas para las víctimas.
El espectáculo que presentaba la costa adriática, uno de los lugares más reclamados por el turismo, era desolador y recordaba una zona arrasada por un bombardeo aéreo.
En la localidad de Bar llegó a zozobrar y hundirse un buque que estaba fondeado en el puerto. Testigos del terremoto en la ciudad de Herceg Novi contaron de la siguiente manera sus impresiones: « Primero oímos un ruido enorme y el edificio en el que estábamos empezó a temblar como un castillo de naipes. Se tambaleaban -prosiguen- incluso las mesas de hormigón en un jardín vecino. Se cortó la corriente eléctrica y de los grifos comenzó a salir agua amarilla. »
Un puerto, destruido
El Ejército Popular yugoslavo (las milicias) trabaja incesantemente en las tareas de desescombro y alojan en los campos de fútbol y de deportes alejados de las poblaciones a los heridos y a todos aquellos que han perdido sus hogares.
Especialmente espectacular debió ser la desaparición material del puerto de Zelenika, engullido por las altas olas producto del maremoto causado por la onda sísmica.
A primeras horas de la tarde se produjo otro movimiento, de mediana intensidad, que acabó por derrumbar algunas casas que permanecían en pie, pero no causó víctimas.
El terremoto causó 35 víctimas en Albania y más de trescientos heridos.
La embajada española ha confirmado que la colonia española se encuentra perfectamente.
