Estreno del corto "A salto de mata", de Raúl Peña
El cortometraje A salto de mata, de Raúl Peña, que obtuvo el segundo premio en el último Festival Internacional de Cine de Bilbao, se acaba de estrenar en el local Madrid 3 (sala Agustín Lara). Con una duración de doce minutos, rodado con sonido directo, interpretado por Raúl Peña y su hermana Julia Peña, el corto trata el tema de la soledad humana.Raúl Peña, de 36 años, graduado en la antigua Escuela de Cine, es autor de casi un centenar de cortos documentales, en su vertiente industrial y publicitaria, y de dos largometrajes: Los amores difíciles (1967) y Prana (1969), que obtuvieron poca aceptación en el público. «Mi comienzo en el cine con estos dos largos -declaró a EL PAIS- no encontró apoyos ni un buen lanzamiento. Por este motivo renuncié a la lucha por el cine largo e incluso de autor y puse mi calidad profesional al servicio del cine corto o documental. Con el corto A salto de mata regreso a mi concepción del cine, con un predominio del sentimiento sobre la razón.»
El realizador de A salto de mata sostiene que su película es vitalista e intuitiva. «En una primera lectura, el corto tiene un carácter sociológico, casi costumbrista, al intentar conocer la respuesta de dos clases sociales distintas que pretenden comunicarse, representadas por un ejecutivo de publicidad y una muchacha de servir, que se encuentran perdidos en un campo. Esta historia determinada, con un contenido sentimental potenciado por la interpretación de dos hermanos, no tiene un planteamiento lineal, sino que recurre a la sorpresa del espectador al participar en el misterio de la soledad del hombre. El cine, como expresión artística y estética, me interesa por su acumulación de sentimiento, su aspecto de magia, por encima de la razón y las palabras.»
En los dieciocho años de profesión cinematográfica, Raúl Peña ha recorrido las distintas facetas, desde la interpretación, ayudante de cámara y realización. «Hacer cine industrial y publicitario no es el objetivo de mi vida, incluso los publicistas nos acusan a los realizadores de hacerlo como recurso. Me considero un muy honrado profesional y me esfuerzo por dar el mejor cine a cualquier producto que llega a mis manos.»
«En cuanto a los problemas del corto, no merece la pena insistir en su falta de protección y la ausencia de público. No creo que sea un problema de espectadores. El público asiste cuando se hacen películas buenas, cosa realmente difícil de conseguir. Los cortos no suelen ser buenos porque son, en general, experiencias de realizadores jóvenes. Este campo de experimentación es al mismo tiempo una cualidad de los cortos, ya que no se puede hacer en el cine largo. He realizado con absoluta libertad A salto de mata, en una línea personal, dejando volar la imaginación, que pienso seguir en mi próximo largometraje, que preparo en la actualidad.»
Babelia
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