Los mataderos pueden quedar paralizados por la huelga de industrias cárnicas

El Ayuntamiento madrileño se ve afectado durante estos días, directa o indirectamente, por una serie de conflictos que, por el momento, y excepto en el caso del de los bomberos, no tienen perspectiva de solución inmediata. A la huelga mantenida desde hace seis días por los trabajadores del Mercado Central de Frutas y Hortalizas se suma la iniciada el pasado viernes por los trabajadores de la grúa y la que pueden efectuar hoy los empleados de las industrias cárnicas, a pesar de haber sido declarada ilegal por el Gobierno Civil.

La huelga de trabajadores del Mercado Central de Frutas y Hortalizas de Legazpi continuó ayer sin ninguna novedad, al mantener las mismas posturas, mayoristas y empleados, desde el comienzo del paro el pasado día 1. En la tarde de ayer las partes afectadas fueron llamadas a negociar por la Delegación de Trabajo, aunque las posturas encontradas sobre las peticiones salariales hacían, a priori, difícil llegar a un acuerdo.Al margen de la búsqueda de soluciones, el abastecimiento de frutas y hortalizas puede considerarse normal a pesar de haber descendido ligeramente la entrada de género y su comercialización. Durante el sábado según datos facilitados a EL PAIS, entraron 1.315.800 kilos -de ellos 740.800 de frutas y el resto de hortalizas- que, en comparación con el sábado anterior, supusieron 100.000 kilos menos «lo que significa que la situación es prácticamente normal». La venta a detallistas fue de un millón de kilos, con lo que se evitó el desabastecimiento en los mercados.

Aunque se había rumoreado que los cauces, en caso de falta de género, podían ser diferentes a los normales, con suministro de frutas y hortalizas desde el lugar de origen, fuentes del Ayuntamiento informaron que no se había tenido que acudir en ningún momento a estas soluciones.

No habrá falta de carne

La huelga anunciada por las industrias cárnicas para hoy, martes, y que el pasado sábado fue declarada ilegal por el Gobierno Civil no dejaría sin carne a Madrid aun en el caso de que se realizara por parte de la totalidad del sector. Las opiniones recogidas indican que el paro de los trabajadores, de veinticuatro horas, sería compensado por el stock existente en los mataderos, tanto en los privados como en el municipal. En este último, según manifestó el delegado municipal, Pablo González Liberal, hay carne para dar cobertura a las necesidades normales de un día.El suministro de carne que sale del matadero municipal representa el 45-48% -lo que supone unos 140.000 kilos- del total consumido en Madrid. «Es de suponer que las empresas cárnicas, avisadas desde hace tiempo de la huelga, hayan preparado sus cámaras para hacer frente a la situación.»

Los bomberos reanudan su trabajo

Los bomberos acordaron el pasado sábado reintegrarse hoy a sus actividades normales, tras cinco semanas de conflicto, después de que el teniente alcalde Enrique Villoria les prometiera el reconocimiento de las horas trabajadas por los funcionarios, «que son 93 y no menos como se decía» y la inclusión en la antigüedad de los meses de entrenamiento que los bomberos realizan antes de entrar en el cuerpo. «Queda por conseguir el aumento en la cantidad que se nos paga como plus de peligrosidad y que según nos informó el señor Villoria está congelado y depende de Administración local.»

La grúa en huelga, desde el viernes

Los trabajadores de Cemesa, empresa concesionaria de la grúa, se encuentran desde el pasado viernes en huelga como resultado de una situación calificada como singular por las partes afectadas. Los trabajadores de la grúa solicitaron a la empresa la negociación del convenio colectivo y un incremento en el salario cobrado. Según parece la empresa informó que la subida dependería del Ayuntamiento, ya que desde el pasado mes de diciembre el servicio está intervenido; sin embargo, las autoridades municipales dicen no tener nada que ver con las relaciones laborales de los empleados con la empresa que les contrató. «El Ayuntamiento tiene intervenido el servicio, no la empresa. Lo único que hemos hecho ha sido recordar a los interventores de la empresa que existe una limitación de topes salariales fijada por el Gobierno en un decreto-ley. Ahora lo que hagan ellos afectará o no a la gestión de intervención del servicio si se tiene o no que modificar la tasa dada a Cemesa para el pago de los trabajadores.»