Tensiones hispano-norteamericanas por el aumento de los derechos compensatorios
El Departamento del Tesoro norteamericano está decidido a aumentar de nuevo los derechos compensatorios que gravan a las exportaciones españolas de calzado, zinc y aceitunas de mesa, anulando así la reducción de esas tasas, que fue decretada el pasado mes de junio.La decisión del Gobierno norteamericano, que afectará a las importaciones procedentes de varios países, entre ellos España, está prácticamente tomada, y podría anunciarse oficialmente en los próximos días.
El pasado 7 de junio, la Administración Carter redujo en aproximadamente un 60% los derechos compensatorios que venían aplicándose a los tres productos españoles citados, aludiendo a la «equidad» que debe presidir el tratamiento a las importaciones, con lo que en la práctica se reconocía la existencia de medidas discriminatorias contra España.
Sin embargo, y bajo la presión de los fabricantes nacionales, el Departamento del Tesoro abrió el «caso español» el pasado mes de agosto. Los sectores interesados en que se aumenten los gravámenes sobre los productos españoles alegan que el sistema de «impuestos en cascada» utilizado en España permite la exención fiscal encubierta a las exportaciones de nuestro país, por lo que piden la aplicación de derechos compensatorios más elevados.
España adoptará, en un plazo relativamente breve, el sistema de «valor añadido», que es el comúnmente empleado en los países de la Comunidad Económica Europea, pero por el momento debe seguir utilizando el sistema de «imposición en cascada». Fuentes norteamericanas declararon ayer que hasta que España no adopte el método de «valor añadido» será muy difícil una reducción de las tasas compensatorias impuestas por Estados Unidos a nuestros productos.
Diferencias de criterios
Las citadas fuentes indicaron que el Departamento de Estado e incluso la embajada norteamericana en Madrid se muestran contrarias al aumento de los derechos compensatorios, dado el gran déficit comercial español con Estados Unidos y la posible influencia de esta medida en el clima político. Pero el Departamento del Tesoro parece decidido a seguir adelante.
Mientras se realizan intensas gestiones por parte de la embajada española en Washington, en medios exportadores españoles se comentaba que el descenso de valor del dólar ha gravado en la práctica mucho más a las exportaciones españolas que cualquier aumento de las tasas compensatorias, y protegido, por tanto, mucho más a los fabricantes norteamericanos. Según estas fuentes, el volver a incrementar tales derechos supone una nueva discriminación contra las exportaciones de calzado, aceitunas y zinc y no contribuye precisamente a las buenas relaciones entre Madrid y Washington.
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