El Gobierno no se pronuncia sobre la identidad de los agresores del pesquero "Cruz del Mar"

El Gobierno, a la vista del comunicado facilitado al término de la reunión celebrada ayer en el palacio de la Moncloa, no ha considerado suficientes los informes presentados por el ministro de Transportes y Comunicaciones como para pronunciarse sobre quiénes son los autores de la sangrienta acción llevada a cabo el martes por la noche, en aguas saharianas, contra la tripulación del pesquero español Cruz del Mar.

Sin embargo, el señor Sánchez Terán insistió ayer tarde en Albacete en la existencia de pruebas que permitirían identificar a los autores de este atentado que se saldó con siete víctimas, pero se negó a facilitar ningún dato preciso, ya que, dijo, «la información de los hechos y sus consecuencias políticas están reservadas al Consejo de Ministros».De fuentes fidedignas EL PAIS ha sabido que el ministro de Transportes ha venido de Canarias con la convicción de que se trata de un ataque del Frente Polisario, aunque tal vez no ha podido presentar sobre la mesa del Consejo pruebas irrefutables que avalen esa convicción.

La nota oficial se limita a decir que el Consejo de Ministros «ha recibido un amplio informe sobre el bárbaro ataque» y que refrenda «las amplias medidas de seguridad, para la flota pesquera, acordadas el pasado miércoles bajo la presidencia del presidente del Gobierno y que han sido desarrolladas y puestas en aplicación tras las reuniones celebradas por el ministro de Transportes y Comunicaciones en Las Palmas».

«Como consecuencia de estas medidas -se dice a continuación- se ampliará la presencia de la Armada española en la zona. Siete unidades de la Armada (tres destructores, una corbeta, dos patrulleros y una unidad de apoyo) han empezado a actuar ya y próximamente se incorporarán unidades complementarias, junto a otras medidas de cobertura». Las medidas, «por su concreción y operatividad», permitirán una gran protección a nuestra flota pesquera.

«Por otra parte -se dice finalmente- el Gobierno continuará la investigación en profundidad de los hechos ocurridos y de todas sus implicaciones políticas.»

Por su parte, el gobernador civil de Las Palmas facilitó información a los armadores sobre las medidas de seguridad que amplían lo relatado en el comunicado oficial del Gobierno. Al parecer, serán en total veinte buques de guerra los que patrullen las aguas saharianas. Otras medidas serán acordadas por el comité de enlace que se ha de formar entre armadores y pescadores, presidido por el almirante jefe de la zona marítima y el gobernador civil. También habrá vigilancia aérea y se pedirá disciplina a los pesqueros para estar en comunicación con los buques nodrizas. Se han hecho, además, contactos con los Gobiernos interesados para que garanticen la seguridad de las aguas que administran.

En cuanto a la posibilidad de armar a las tripulaciones, el gobernador afirmó que el jueves la medida se había considerado excesiva pero no se había descartado.