Según Zaccagnini, no hay alternativa para el Gobierno de Andreotti
Benigno Zaccagnini, jefe de la Democracia Cristiana italiana (DC), acaba de reiterar su apoyo al actual Gobierno democristiano de Gitilio Andreotti «por falta -dijo- de alternativa para el equilibrio político actual». En el mismo sentido se han manifestado los socialistas y los comunistas.En un mitin en Trento, el líder de la DC indicó que la crisis política actual sólo podrá superarse mediante una «colaboración más estrecha y convencida entre los partidos y las fuerzas sociales». En una aparente advertencia al presidente del Senado, Amintore Fanfani, y al sector derechista de su partido, Zaccagnini añadió que la situación de «emergencia» se prolongará aún «bastante tiempo», y que por tanto la DC debe respetar la política de «confrontación» con el Partido Comunista (PCI) y el acuerdo, programático.
Paralelamente, el secretario general del PCI, Enrico Berlinguer, mantuvo Una reunión con el primer ministro durante la cuál ambos convinieron en que el debate parlamentario sobre el asesinato de Aldo Moro, previsto para la próxima semana, no debe amenazar el «equilibrio» político actual.
Según Zaccagnini, una crisis provocada por ese debate equivaldría a favorecer los objetivos de las Brigadas Rojas, que con el asesinato de Moro intentaron «desestabilizar» el régimen y, provocar la ruptura del pacto entre los partidos democráticos.
Tras la publicación, por el diario La Repubblica, de la última entrevista periodística concedida por Moro, en la que el dirigente asesinado se mostraba en contra del «compromiso histórico» y en favor de una «alternativa de poder», portavoces de diversos sectores democristianos, como Dodrato Y Galloni, empiezan a multiplicar sus declaraciones en respaldo de esa tesis.
