México y España acuerdan intensificar la búsqueda de recursos minerales

Un incremento en la cooperación en materia científica y técnica, recursos mineros y sector siderúrgico, son los aspectos más concretos y significativos reflejados en el comunicado conjunto de cooperación industrial entre España y México, firmado en la mañana de ayer por el secretario de Patrimonio Industrial de México, José Andrés Oteyza, y por el ministro español de Industria y Energía, Agustín Rodríguez Sahagun.

En el acto de la firma del comunicado se firmó y rubricó el texto del Acuerdo Complementario al Convenio Básico de Cooperación Científica y Técnica y el Convenio Básico de Cooperación Económica en materia de recursos geológicos y mineros. Igualmente, se firmó un acuerdo entre Sidermex y Ensidesa para colaborar en las áreas técnicas, de integración industrial y comercialización. Por último, se ha preparado un contrato, que ha quedado firmado por sus respectivos presidentes, entre Ensidesa y Sicartsa (Siderúrgica Lázaro Cárdenas-Las Truchas) de México, para que la empresa española gestione la compra en Europa de partes y repuestos con destino a la empresa mexicana.Dentro del enfoque global, cabe reseñar como lo más importante en materia de acuerdos la voluntad de incrementar las operaciones comerciales de petróleo crudo, sus derivados y productos petroquímicos, en base a la buena experiencia tenida desde mediados de 1977 en que, en forma regular, se iniciaron en España las operaciones de transformación de etileno mexicano por polietileno, así como la compraventa de petróleo crudo y de sus derivados. Otro aspecto resaltable es la colaboración futura en el desarrollo de la industria naval mexicana, específicamente en el área de capacitación de personal y de creación de nuevos astilleros.

Cooperación minera

Uno de los aspectos más significativos y trascendentales de las futuras relaciones hispano-mexicanas se desarrollarán en torno al sector minero. Con este objeto se firmará en breve el Convenio Básico de Cooperación Económica en materia de recursos minerales.Los términos de este convenio, todos ellos coherentes con la política minera española, se concretan en cuatro puntos.

El primero de ellos tiende a conseguir una acción conjunta de intereses por ambos países con objeto de formar empresas mixtas y participar en la búsqueda de minerales, básicamente en tierras mexicanas.

El segundo punto persigue las inversiones conjuntas en terceros países, de cara a conseguir productos minerales.

El tercer aspecto gira en torno a la identificación de operaciones comerciales interesantes en materia minera, lo que permitiría un intercambio de cobre y azufre, de los cuales España es deficitario, por potasio que España está en condiciones de exportar.

El último aspecto afecta a la cooperación científico-técnica y va desde la formación profesional hasta el desarrollo de técnicas directamente relacionadas con la energía geotérmica, pasando por la recuperación de potasas, bromo y manganeso a partir de salinas existentes en México.

Este tipo de acuerdos persigue el lograr un abastecimiento de materias primas minerales de las cuales España es absolutamente deficitaria y sin posibilidades de mejora y la colocación de tecnología y bienes de equipo en los países con los cuales se desarrolla este tipo de convenios.

Similares acuerdos se han logrado con Perú, Colombia y Ecuador.