La mayoría de los norteamericanos, descontentos con Carter

La mayoría de los norteamericanos cree que el presidente Jimmy Carter no está actuando con la firmeza que ellos consideran necesaria para estar al frente de la nación, según un sondeo cuyos resultados fueron hechos públicos ayer. Patrocinada por la agencia Associated Press y la cadena de televisión y radio NBC, la encuesta de opinión pública muestra que el 66% de los consultados piensan que el presidente Carter no ha sido lo suficientemente firme en sus primeros dieciocho meses de mandato.

Un 25 % opina que Carter ha actuado correctamente, mientras que sólo un 3 % cree que ha sido demasiado duro y el restante 6% no tiene opinión formada al respecto.

Casi las tres cuartas partes de los encuestados califica la gestión de Jimmy Carter de «pobre». Concretamente, aquéllos que piensan que el presidente de Estados Unidos está realizando una labor mediocre ascienden, al 73%. Entre los que conceden a Carter una calificación de «bueno» o de «excelente» suman un 26% y el 1% restante se declara indeciso.

Los resultados a la pregunta sobre la opinión que merece la gestión del presidente coinciden prácticamente con los obtenidos en otra encuesta encargada por los mismos medios informativos el pasado mes de junio. Incluso puede detectarse un aumento de algunos puntos entre los que desaprueban el comportamiento del inquilino de la Casa Blanca, pero que no supera el margen de error del 3% que se admite en este tipo de sondeos, realizados por teléfono entre una muestra nacional de casi dos mil personas.

Grave pérdida de popularidad

Desde principios del presente año todos los sondeos de opinión pública realizados en Estados Unidos sobre el presidente Carter han mostrado una caída en picado de su popularidad que no sufrió ninguno de los cinco últimos presidentes. Por ejemplo, un sondeo del Instituto Harris realizado dos meses después de llegar al Poder, daba a Carter la aprobación del 67% de los encuestados. Esta cifra comenzó a descender vertiginosamente en los meses sucesivos, hasta tal punto que en abril de este año había quedado reducida al 21% de respuestas favorables a Carter, mientras que aquéllos que desaprueban su gestión sumaban el 62%. La mayoría de los encuestados en esta última ocasión piensan que Carter no es lo suficientemente enérgico a la hora de hacer frente a los problemas de política internacional, pero muy pocos de ellos se muestran partidarios de una ruptura de las conversaciones SALT con la URSS, ni siquiera aunque esta ruptura se hiciera en nombre de la defensa de los derechos humanos.

Preocupado por las evidencias de que su popularidad está llegando a cotas increíblemente bajas, Carter ha emprendido una campaña de mejora de su imagen pública, que incluirá varios viajes por distintos estados de la Unión y la búsqueda de horas de mayor audiencia para sus intervenciones ante las cámaras de televisión.