El embarazo en las solteras no es causa de despido

La Magistratura de Trabajo de Valladolid ha declarado improcedente el despido de Marisol Hernández, profesora del colegio Divina Providencia de Tordesillas, que fue expulsada de su puesto por haber quedado embarazada siendo soltera «y no tener intención de casarse», según indicaron las religiosas que regentan el centro.

El despido tuvo lugar el 21 de mayo y varias semanas después se celebró el juicio por despido en Magistratura ante la presencia de numerosas feministas que ovacionaron en diversas ocasiones a Marisol Hernández.

El abogado de la profesora, un sacerdote socialista, indicó que el despido era improcedente, injusto, discriminatorio y que violaba los derechos humanos. El letrado de la parte demandada señaló que Marisol Hernández había cometido un acto de indisciplina y desobediencia. Un doctor en Teología indicó finalmente que el despido podía considerarse como incitación al aborto.

En la sentencia, el magistrado considera que la situación de embarazo «en forma alguna puede juzgarse opuesta a los fines educacionales del centro». Afirma también que «por lo que respecta al hecho de estar soltera y no tener intención de casarse no puede considerarse que vulnere principios o hábitos religiosos al no acreditarse que la actitud haya sido acompañada de una proclamación de ideas favorables a la promiscuidad sexual o a la libre unión de la pareja sin vínculos de permanencia».

La sentencia obliga a las religiosas a la readmisión de la profesora expulsada.

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