Argel vuelve a denunciar la "otanización" de África

La fuerza militar interafricana enviada a Zaire y respaldada por el actual presidente de la OUA, Omar Bongo, sigue suscitando críticas en Argelia, donde se la considera como un elemento susceptible de incrementar la «desestabilización» del continente africano.

Desde hace varios días, la prensa oficial argelina redobla sus ataques contra lo que califica de «otanización» de África.

La posición argelina sobre los acontecimientos de Shaba se mantiene en los términos del primer día, a saber, que se trata de un conflicto interno de Zaire en el que los ex gendarmes katangueños, habrían contado con el apoyo de la población lunda, que habita la región aludida.

Argelia mantiene que la solución de los problemas africanos sólo puede hallarse en el marco de la OUA, aunque en numerosas ocasiones, al lanzar esa fórmula, no se consideran aquí de las profundas divisiones internas de la organización africana. A propósito de la cumbre extraordinaria sobre el Sahara occidental que, teóricamente, debe celebrarse en Jartum antes de la reunión de jefes de Estado y de Gobierno africanos, parecen haberse perdido aquí todas las esperanzas de que la reunión tenga lugar, en la medida en que existen otras preocupaciones más inmediatas.

El régimen argelino sería favorable al llamamiento lanzado el viernes pasado por los presidentes de Niger, Seyne Kuntche, y de Benin, Mathieu Kerekou, quienes solicitaron una concertación entre los jefes de Estado de los países miembros de la OUA para expresar su «inquietud» frente a las nuevas dimensiones que estaría tomando el conflicto del Sahara occidental.