Alternativa esperanzadora de Sánchez Puerto
Sánchez Puerto ha llegado a la alternativa, tras una larga etapa en el escalafón inferior. No toreó mucho de novillero, pero logró adquirir un buen oficio y un toreo de calidad Su paso a matador de toros es una puerta a la esperanza, toreros con personalidad, oficio y buen gusto, no abundan. En el toro de la alternativa, toreó aceptablemente a la verónica y dio media muy buena en el quite. El toro, manso declarado, saltó al callejón por terrenos del seis y llegó quegrantado a la muleta. Comenzó Sánchez Puerto de rodillas con dos ayudados por alto de añejo sabor; siguió de pie con un ayudado por bajo y el remate impecable del de pecho. Hizo una faena templada con la diestra, con detalles de buen gusto. No se acopló con la izquierda y pecó tal vez de frialdad y de ahogar la embestida al toro.Al sexto, manso y flojo, le realizó un trasteo eficaz de torero con oficio, mató con brevedad.
Plaza de Carabanchel
Cinco toros de Román Sorando, y uno de La Jarilla (sexto lugar): Terciados, mansos, justos de fuerza, nobles, exceptoel quinto, difícil. Antonio José Galán: Palmas. Dos vueltas, la segunda por su cuenta. Luis Francisco Esplá: Vuelta. Palmas. Sánchez Puerto, que tomó la alternativa: Oreja. Vuelta por su cuenta.
Totalmente falto de sitio Antonio José Galán. Nulo con la capa, con la muleta el conocido número de citar de perfil, la muleta retrasada y el pico. Nula quietud, muletazos eléctricos y tontina va, tontina viene, rana incluida. Tras matar al quinto, hubo una minoritaria, pero ruidosa, petición de oreja y Galán en el tercio miraba al presidente Corominas como diciendo «i démela, hombre! »
Luis Francisco Esplá dio al tercero las dos mejores verónicas de la tarde, ambas por el pitón derecho. Las manos bajas, temple y empaque; luego estuvo variado con el capote, pero sin calidad. Banderilleó a sus dos toros, con más facultades que lucimiento y abusó de las carreras y pasaditas en falso. Al tercero lo muleteó con temple sobre la derecha, pero sin ligar; a cada remate del muletazo daba dos o tres pasitos para colocarse de nuevo. Más ligados fueron los naturales, pero vulgares, superficiales. Con el quinto que entraba punteando y echaba la cara arriba, estuvo muy valiente. Aguantó derrotes y sacó muletazos de mérito, pero todo lo estropeó con la espada.
Babelia
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