El guardia civil herido el atentado de San Sebastián, clínicamente muerto
El guardia civil Miguel Iñigo Blanco, que resultó gravemente herido en el atentado cometido el pasado martes en San Sebastián, permanece internado en la residencia sanitaria Nuestra Señora de Aránzazu de esta ciudad, en estado clínicamente muerto, según informa la agencia Europa Press.El parte médico que facilitó esta información añade que, aunque mantiene las constantes vitales, el estado del herido es extremadamente grave.
Por su parte, Juan Giménez Bermúdez, otro de los guardias civiles que fue objeto del atentado, se halla fuera de peligro, tras habérsele extraído una bala del vientre. El último de los supervivientes de la mencionada agresión, José Antonio Amado, herido de bala en un muslo, permanece en observación en el centro sanitario.
Fuentes policiales han señalado que el atentado pudo ser realizado por dos personas que dispararon alrededor de treinta balas. En el lugar del suceso se encontraron dieciocho casquillos de las marcas Geco y Fn, lo que indica que las dos armas, tipo metralleta, eran de distinto origen, aunque ambas del calibre nueve milímetros Parabellum, armamento generalmente utilizado por la organización ETA militar.
