Fin de curso de las orquestas y coros nacionales

Después de quince años de titularidad, Rafael Frühbeck de Burgos se ha despedido de la Nacional con el Requiem, de Verdi, en concierto que, a su vez, clausuraba la presente temporada del Real.El adiós del maestro burgalés ha sido brillante y significativo: brillante porque el público, sin mayo res aspavientos, dedicó especiales ovaciones a quien ha conducido la ONE durante tres lustros; brillante, también, porque a la efemérides asistió la Reina. Significativo por que los últimos pentagramas dirigidos por Frühbeck al Coro y Orquesta Nacional han respondido a un concepto muy cultivado por él: la música de gran espectáculo -lo que no implica ausencia de contenido, como en el caso del Requiem-, conjunción de masas sinfónicas y corales, tendencia a las sonoridades opulentas, contrastadas en esta ocasión por matices contrarios tan acusados y conseguidos como en los Kyries. La carrera deljoven director continúa, como ha sido ampliamente divulgado, y esperamos que, de vez en vez, halle un hueco para volver a dirigir la orquesta con la que se hizo célebre y desde cuyo podium ganó la internacionalidad.

Antonio Ros Marbá, el nuevo conductor de la ONE, iniciará su misión el próximo otoño, aun cuando antes dirija en Granada y revalice en Estrasburgo los triunfos recientes obtenidos en Berlín. Con Ros, participarán en el curso otros maestros, entre los que destacan Sergiu Celibidache y Giulini. Estamos ante una nueva etapa que debe ser seguida con entusiasta atención y buenos deseos.

Schubert, Mozart y Mahler

Dos conciertos importantes cerraron la serie de la RTVE antes de emprender su larga tourné por Estados Unidos de México. Alberto Blancafort, director del Coro, tuvo a su cargo un programa en el que si la Misa en do menor, de Mozart, consiguió excelente línea, la Sinfonía incompleta, subrayó el intrínseco valor musical -no sólo coral- del director barcelonés. Como dice Alvaro Marías, el «planteamiento de la obra fue magnífico: tranquilo, sereno, tocándolo todo, dejando sentir el pulso de la propia música, con un sentido estático de las tensiones muy característico de Blancafort».

Odón Alonso salió triunfador en el difícil empeño de la Tercera, de Mahler. Difícil como obra y peliagudo cuando no se cuenta con los ensayos precisos y, además, la orquesta simultánea su trabajo con la preparación de Manon Lescaut. Si vamos a la intención, la de Alonso fue del todo encomiable. Si a los resultados, más que estimables, en algunos casos muy bellos y con incidencias aisladas que provocaron la protesta de unos pocos. No me parece merecida, pero, en cualquier caso, nada modifica el nivel conseguido ni la aquiescencia mayoritaria del público.

Para la próxima temporada la RTVE anuncia, entre su repertorio, estrenos españoles y reposiciones de Montsalvatge, García Abril, -Cristóbal Halffter, Manuel Blancafort, Evaristo Fernández Blanco, Luis de Pablo, Tomás Marco, Fernández Alvez, Conrado del Campo, Albéniz, Remacha y Oscar Esplá. Y la participación de maestros invitados de la talla de Kondrashin, Marriner, Torkanowsky y López Cobos.