Armadores gallegos y vascos quieren entrevistarse con Suárez

Los armadores gallegos que, junto con los vascos, emplean sus flotas de pesca de altura en caladeros de la CEE, son muy pesimistas respecto del futuro inmediato, después de la drástica decisión comunitaria. Galicia tiene más de 500 barcos afectados por la medida que, según representantes del sector, reduce a menos del 25% las capturas de la flota española, cifradas anualmente en 210.000 toneladas.El lunes, en Madrid, armadores gallegos y vascos van a intentar entrevistarse con el presidente Suárez, los ministros de Transportes y Comunicaciones y el de las Comunidades Europeas y el director general de Pesca. En todos los casos, lo que se pretende es que el Gobierno garantice el pago de las multas que se puedan imponer a pesqueros españoles en aguas del Mercado Común, ya que quieren seguir faenando en tanto no se haga una reestructuración a fondo del sector extractivo pesquero.

En conjunto, la CEE ha concedido 2.936 toneladas de merluza en los caladeros de Rockal (Gran Sol) y Golfo de Vizcaya, durante el período comprendido del 21 de febrero al 21 de mayo, tiempo en el que se podrán pescar 5.882 toneladas de otras especies accesorias y 17.000 toneladas de anchoas.

Por primera vez, los armadores lo dan todo por perdido y son muy pesimistas, incluso en lo que se refiere a una reunión de científicos del Consejo Internacional para la Explotación del Mar, que se celebrará en La Rochelle del 28 al 31 de este mes, con presencia española. Algunos de los científicos que acudirán a la reunión han manifestado a EL PAÍS que ellos intentarán que la captura total permisible de merluza, que está en 37.250 toneladas, según el Mercado Común, pase a más de 50.000 toneladas, por la riqueza pesquera de los distintos caladeros así lo permite.