La crisis monetaria, protagonista de la reunión de ministros de Economía de la CEE
El fin de semana impone una tregua en las tensiones monetarias caracterizadas por una nueva depreciación del dólar, frente a las divisas europeas fuertes, como el marco alemán, franco belga-luxemburgués, florín holandés y franco suizo.El lunes los ministros de Economía y Finanzas de la CEE se reunirán en Bruselas. En su orden del día oficial no figura ningún análisis de la tensión actual monetaria entre USA. la CEE y Japón; sin embargo, no se excluye que traten el capítulo en el curso de su almuerzo privado que precederá la sesión oficial del Consejo.
Una de las monedas comunitarias que figura en el interior de la serpiente monetaria -la corona danesa- sufre las presiones de la devaluación de otras divisas nórdicas, corona noruega y corona finlandesa.
Los ministros de Asuntos Exteriores de los países nórdicos (Suecia, Noruega, Islandia, Finlandia y Dinamarca) se encuentran reunidos este fin de semana en Oslo, y no se excluye que el capítulo de paridades monetarias entre el grupo nórdico sea objeto de deliberaciones.
Si la corona danesa debe devaluar -cosa que se desmiente oficialmente en Copenhague-, supondrá un grave choque para la frágil cohesión monetaria de las cinco divisas que flotan en un margen limitado, del 2,25 % (marco alemán, franco belga-luxemburgués, florín holandés y corona danesa), en el interior de la denominada serpiente monetaria de la CEE.
Para los países del Mercado Común, que no pierden la esperanza de realizar su proyecto de unión económica y monetaria, la brutal depreciación del dólar -casi el 40 % desde 1970, con respecto al marco- resulta preocupante.
Las críticas de Estados Unidos, apoyadas por las del director del Fondo Monetario Internacional, el holandés Johannes Witteven, a la prudencia germana de estimular su economía son las acogidas en medios europeos.
Bonn no acepta, en principio, la idea de Washington de que la crisis económica debe encontrar una salida con un estímulo al consumo en los países con excedentes de balanza de pagos (República Federal de Alemania y Japón, en particular). Los alemanes consideran que la actitud de Estados Unidos de dejar caer el dólar para contrarrestar la competencia alemana y japonesa en el comercio internacional, incluidas las importaciones en dirección a Estados Unidos, no es la mejor arma para superar la crisis.
A pesar de todo, nadie ignora en la CEE que Estados Unidos continúa siendo el protagonista de la guerra monetaria. Las enormes reservas de dólares acumuladas en Europa (de 600.000 a 700.000 millones de dólares en eurodólares) y la preponderancia de la divisa norteamericana en el comercio mundial dan gran libertad de presión a las autoridades monetarias de Washington.
Incluso ante las amenazas de algunos países productores de petróleo de la OPEP, que evocan la posibilidad de sustituir al dólar como moneda de referencia para la fijación de los precios del petróleo, medios monetarios de la CEE opinan que los grandes de la OPEP (Arabla Saudita e Irán) preferirán antes aumentar el precio del oro negro, para compensar la depreciación del dólar, que sustituirlo por un conglomerado de divisas fuertes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.