España no podrá ingresar en la OTAN antes del año 1980

España será la sede de la tercera fase de la Conferencia de Seguridad y Cooperación Europea (CSCE) en 1980, siempre y cuando el Gobierno del presidente Adolfo Suárez suspenda su sigilosa estrategia de acercamiento a la OTAN, durante los dos próximos años. De lo contrario, Viena podría convertirse en la anfitriona de la conferencia.

La URSS y sus aliados dijeron amén a la candidatura española a condición de que los dos próximos años Madrid congele su integración en la Alianza Atlántica, y a la espera, quizá, de que la izquierda, anti-Atlántica llegue pronto al Gobierno. Éste es, ni más ni menos, el precio impuesto por la URSS, que, por otra parte, desea también que España frene su acercamiento táctico (a plazo corto) a la OTAN.A pesar de que el presidente Suárez y su ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, afirmaron que este era un debate de competencia del Parlamento, en Madrid y en Bruselas crecen en secreto los contactos y las iniciativas hispano-aliadas.,

He aquí unos ejemplos: por tercera vez diplomáticos y funcionarios españoles han participado en calidad de observadores en reuniones y debates organizados por la Alianza Atlántica, bien en. su Comité Económico -como ocurrió hace tan sólo unos días o en el llamado Comité de Desafíos de la Sociedad Moderna de la OTAN; se mantienen per manentes contactos entre el se cretariado de la Asamblea Atlántica y la embajada de España en Bruselas, contactos que no han llegado a culminar en la presencia de parlamentarios españoles -también como observadores- en dicho foro. Las actividades atlánticas de la embajada de España en Bruselas, muy superiores a las bilaterales con el reino de Bélgica, están dirigidas por Nuño Aguirre de Cárcer, embajador experto en el tema. Uno de los más espectaculares trabajos de la embajada hispana y de la agregaduría militar fue la preparación, en secreto, del viaje al Cuartel Supremo Aliado (Shape) de altos oficiales de los ejércitos españoles miembros del curso del Ceseden e invitados por el general supremo aliado Alexander Haig; el Ceseden y el Alto Estado Mayor español han realizado, recientemente, estudios secretos sobre los problemas militares y técnicos que supondrían una posible incorporación de España a la OTAN, gracias a un organizado intercambio de datos e informes que de seguro ha perinitido a la Alianza redactar también su libro blanco sobre el tema.

Estos son ejemplos de la táctica cuidada del Gobierno llevada por los señores Adolfo Suárez y Marcelino Oreja.