El premio "gordo", número 34.571, se vendió en Madrid y tocó en Bilbao

El número 34.571, el gordo de la lotería de Navidad, lo ha vendido íntegramente la administración número 13 de Madrid. Desde las 9.30 de la mañana, en que fue cantado el gordo, la esquina de la calle de Alcalá donde está la administración de lotería que ha hecho tantos millonarios, se llenó de gente muy distinta: periodistas, curiosos, algún millonario reciente.

Los primeros en ser localizados eran los de la sucursal del Banco de Bilbao, que son clientes fijos. Allí habían comprado 72.000 pesetas para la casa central, como todos los años, y concretamente para el departamento de extranjero. De ellas, sólo 6.000 se quedaron en Madrid, entre los nueve millonarios más populares de la capital. A Pedro López Deán, Mario Luengo, Emilio Guerrero, Juan Bueno, Gil González, Antonio Suárez y Juan Mufloz Carrasco, les ha tocado cinco millones a cada uno, y a Gómez del Campo y Manuel Rontomé, dos millones y medio y uno, respectivamente. Pasados los primeros nervios -alguno de ellos desapareció al saber del premio, otros se agolparon junto al télex, que mandaba, de una provincia a otra, felicitaciones- empezaron a decir que no es para tanto. Todos ellos son jefes de sección del servicio de extranjero, y, en realidad, el tener este número -como dijo a EL PAIS Emilio Guerrero- «ha sido para no dejar irse la suerte de las manos, después de haber pasado por ellas. Nos lo encargaron los del servicio extranjero de la central de Bilbao y nos quedamos un poquito por si un aquél». Todos ellos esperaban más del número que compartían con sus compañeros de la cuarta planta, en el que jugaban más. La mayoría habla de la casa, de comprarla o de arreglarla, de esas pequeñas deudas, de esas comodidades nuevas que podrán conseguir ahora. Y todos, también coinciden en que, aparte de ser divertido, cinco millones o dos y medio o uno, tampoco le quita a uno de trabajar. Menos los dos menos premiados, el resto son casados y con hijos.Según Fernando Blanco, el lotero de Alcalá, que dice no jugar un duro a este número, y que hace dieciocho años que no daba el gordo, va a estar muy repartido este premio. Y además, se va a disfrutar por provincias. La Asociación Mercantil Española también se ha llevado un buen pico, que ha repartido en la central madrileña y por las sucursales de provincias. Hay millonarios desde dos a veinte millones. En los laboratorios Diquisa han tocado ochenta millones, veinte de ellos a una sola empleada, y en Pro-laboratorios han tocado sesenta millones, repartidos entre catorce empleados, a tres o poco más por persona.

Un caso sorprendente ha sido el de Andrés Navas, que trabaja en la editorial Sedinay. Allí le ha tocado, como a sus compañeros, cinco millones por el tercer premio, pero además, y desde una sucursal francesa, le ha llegado una participación de doscientas pesetas en el número del servicio exterior del Banco de Bilbao. O sea, dos millones más.