Duro ataque del Frente Polisario al Gobierno español en las Naciones Unidas
El Frente Polisario pidió ayer a las Naciones Unidas que hagan todo lo necesario para que España modifique su comportamiento respecto al Sahara Occidental, comportamiento que fue definido como un «crimen internacional», y calificó los acuerdos de Madrid de noviembre de 1975 como «la traición más grande que la humanidad haya conocido jamás».
Un representante de la organización saharaui intervino como peticionario ante la cuarta comisión de la ONU, que se ocupa de los temas relacionados con la descolonización. Hablando en un castellano imperfecto, con numerosos giros franceses, el delegado del Frente Polisario acusó de genocidio y de guerra de ocupación a Marruecos y Mauritania, con la «culpable complicidad de España». Comenzó su intervención el delegado del Frente Polisario recordando las distintas resoluciones de la ONU que favorecían el ejercicio del derecho de autodeterminación por el pueblo Saharaui, con citas de las intervenciones de España en pasadas asambleas generales de las Naciones Unidas en que se reconocía este derecho.
La intervención del Frente Polisario fue especialmente dura para con España, a diferencia de otros discursos anteriores. « La traición de la potencia administradora ha dado luz verde a la agresión perpetrada contra nuestro país por los Gobiernos de Marruecos y Mauritania», dijo el representante polisario.
«El Frente Polisario —continuó el delegado de la República Arabe Saharaui Democrática— se beneficia hoy del apoyo total y global del pueblo español, expresado a través de sus partidos políticos y esta forma de toma de conciencia ascendente a nivel de nuestros amigos españoles llevará al Gobierno de Madrid a volver sobre su traición (sic) cara a nuestro pueblo y a sus compromisos internacionales.»
La causa principal de la situación drástica que se vive en el Sahara Occidental, aseguró el representante del Polisario, es «la traición de España al pueblo Saharaui, tras haberle sometido durante más de noventa años a un régimen de opresión y explotación. España, tras el fracaso de su política de asimilación del pueblo saharaui, a causa de la resistencia histórica de nuestro pueblo para preservar su integridad y su cohesión, ha intentado dar la espalda a sus obligaciones y al deber que le incumbe como potencia administradora. La firma de la pretendida acta tripartita de Madrid, el 14 de noviembre de 1975 constituye la traición más grande que la humanidad haya conocido jamás. La traición de Madrid no tiende solamente a desviar el proceso de descolonización de! Sahara Occidental de su cauce natural, objetivo y político, sino también de vender un pueblo y su patria.»
«Este intento de poner a la comunidad internacional y al pueblo saharaui ante un hecho consumado odioso —añadió— atenta innoblemente contra la forma legal de la descolonización y pisotea los compromisos del Gobierno español como miembro de las Naciones Unidas y priva a un pueblo del derecho más elemental universalmente reconocido.»
Venta de armas a Marruecos y Mauritania
Tras calificar como un «crimen internacional» la actuación de España y declararla culpable de un drama que baña en sangre la región, el delegado polisario llamó la atención de la ONU sobre el hecho de que «España es hoy uno de los principales proveedores de armas y expertos militares a Marruecos y Mauritania, para continuar su política de genocidio perpetrada contra el pueblo saharaui»
Por ultimo, el representante del Polisario pidió a la ONU que ejerza su responsabilidad sobre la descolonización del Sahara, según la carta fundacional, y que lo haga inmediatamente. El secretario general de la ONU debe proporcionar un informe detallado a la XXXII Asamblea General sobre las causas que impidieron al embajador Rydbeck cumplir su misión. El polisario añadió que debía condenarse a Marruecos y Mauritania como países agresores y obligarles a abandonar inmediatamente el Sahara. España debe rectificar su posición, para lo que las Naciones Unidas deben hacer todo lo que esté a su alcance, concluyó.
El embajador de Argelia ante la ONU, Mohamed Bedjaoui, hizo uso de la palabra después para, esgrimiendo argumentos jurídicos, defender la autodeterminación del Sahara. España no ha podido transferir a Marruecos y Mauritania algo que no poseía, como es la soberanía sobre el territorio que administraba y así lo ha reconocido el Gobierno español, que pese a ello no queda exento de su responsabilidad, dijo el delegado argelino.
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