Libano: los palestinos piden ayuda militar a los Gobiernos árabes

El Consejo Central Palestino, reunido finalmente en Damasco con dos días de retraso debido a la grave situación libanesa, hizo ayer un llamamiento a los regímenes árabes para que ayuden militarmente a los palestinos que combaten en el sur de Líbano contra las fuerzas derechistas apoyadas por Israel. «Hacemos frente a la máquina bélica israelí con efectivos relativamente limitados.»Tras una reunión de más de diez horas, el Consejo palestino prometió una escalada militar de la lucha en el interior de Israel. En los bombardeos del sur de Líbano, que prosiguen, interviene la aviación israelí, mientras que su artillería proporciona fuego de cobertura a las milicias derechistas libanesas. Unidades móviles de Israel cruzaron ayer la frontera libanesa y sus lanchas cañoneras penetraron en aguas de aquel país, frente a la costa de Tiro. El enclave fronterizo de Nabatiyeh, en poder de los palestinos, está asediado desde hace días y refuerzos de la OLP se dirigen urgentemente hacia la zona.

Se desconoce el número de muertos ocasionados por el recrudecimiento de los combates, pero fuentes libanesas aseguran que lo indiscriminado de los bombardeos ha producido más víctimas entre los civiles que entre los combatientes.

La declaración política surgida de la reunión del más alto organismo palestino ataca frontalmente el anexionismo israelí, pero trata con cuidado la reciente política norteamericana sobre Oriente Próximo, lo que se interpreta como un claro signo de que los palestinos tienen interés en dejar la puerta abierta a unas posibles conversaciones directas con Washington.

El Departamento de Estado norteamericano subrayó, a comienzos de mes la importancia crucial de, los palestinos en cualquier acuerdo de paz para Oriente Próximo, lo que fue calificado de «paso positivo» por Yaser Arafat y de « trampa » por algunos otros sectores de la resistencia. La declaración de ayer omite por, vez primera toda referencia a la resolución 242 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que indirectamente reconoce el derecho a la existencia del Estado israelí. Tradicionalmente, el Consejo había rechazado con énfasis la resolución citada, por lo que su omisión deliberada en esta ocasión sólo puede significar que los palestinos ya no mantienen una intransigencia radical sobre este punto. La resolución 242 considera «refugiados» a los palestinos y les niega la condición de ente nacional claramente diferenciado.

La tesis norteamericana es que la resistencia debe aceptar la citada resolución de las Naciones Unidas como paso previo a negociaciones directas entre la OLP y Washington.