_
_
_
_

El Gobierno, dispuesto a negociar situaciones preautonómicas

El Gobierno está dispuesto a extender las situaciones autónomas, presupuestarias a todas aquellas regiones que presenten a través de sus representantes un sentimiento autonómico definido y se haya logrado un consenso sobre las reivindicaciones a negociar con el poder central, manifestó ayer el ministro adjunto para las Regiones, señor Clavero Arévalo.

El ministro para las Regiones compareció ayer por primera vez ante la prensa -sólo ha hecho declaraciones a RTVE y a algún medio en particular- para anunciar su próximo viaje al País Vasco a fin de entrevistarse con los parlamentarios y recabar información para someter al Gobierno antes de iniciar la negociación sobre el régimen autonómico provisional de Euskadi.El viaje y la comparecencia ante la prensa del señor Clavero puede significar la entrada en juego de un Ministerio que, siendo sobre el papel el principal gestor gubernamental de la cuestión económica, no ha intervenido en ninguna de las fases decisivas de la negociáción sobre el restablecimiento de la Generalitat. El ministro para las Regiones explicó este papel de segundo orden por el hecho, para él determinante, de que los contactos con Tarradellas se iniciaron antes de su nombramiento.

Acerca de la fase en que se encuentra el tema catalán, el señor Clavero afirmó que no había obstáculos insalvables. «La negociacion -afirmó- está centrada ahora en dos cuestiones: la presencia de los presidentes de las Diputaciones en el Consell y la presencia parlamentaria en la organización de la Generalitat. Para ambas cosas puede haber sofuciones.» Su optimismo es tal que llegó a considerar como muy probable la presencia de Josep Tarradellas en España para antes de que finalice el mes de septiembre.

Reconociendo que las autonomías constituyen «un tema delicado y hasta peligros descartó que en medios militares haya una sensibilidad especial al respecto. «De todos modos -dijo-, creo que la gran responsabilidad de nuestra generación es evitar que las autonomías terminen en guerras civiles y que las guerras civiles no terminen con las autonomías.»

«Creo -añadió- que la idea regional está hoy universalizada; por eso UCD en su programa promete un marco común igualitario para todas las regiones, lo que no quiere decir que sea uniforme. Pero las autonomías de ningún modo pueden servir para aumentar el foso que separa a unas regiones de otras. Por eso me pronuncio contra la aplicación de las recaudaciones impositivas en el mismo territorio en que se perciben.» Sin embargo admitió la necesidad de condotar a la región de recursos propios.

En este sentido manifestó que a su entender el Senado debería quedar configurado como una auténtica Cámara de las Regiones, una de cuyas misiones sería distribuir entre las regiones con criterios de redistribución los recursos establecidos en el presupuesto. Sobre el coste marginal de una administración a escala regional, además de las administraciones municipal, provincial y central, el señor Clavero apuntó la posibilidad -que él no estima muy viable en algunas regiones.donde las diputaciones juegan un papel de primer orden, como en el País Vasco- de suprimir parte de la burocracia provincial.

Respecto a si los tribunales de justicia constituirán materia autonómica, afirmó que es una decisión de rango constitucional, pero sí cree necesaria la existencia de un tribunal constitucional que resuelva los futuros conflictos interregionales.

Finalmente definió la autonomía plena -aunque se remitió a lo que la Constitución decida- como un reconocimiento de la personalidad regional, transferencia de funciones del Estado, establecimiento de una hacienda propia, estatuto de derecho autónomo y un poder normativo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_