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La asamblea de la película «Las truchas» protesta por las medidas de los sindicatos

La asamblea de la película Las truchas amplía la información (véase EL PAIS, de 23 de agosto) sobre los conflictos surgidos durante el roda e de la misma a través de una nota firmada por 72 actores y técnicos. En ella se manifiesta que la asamblea de rodaje fue convocada a petición de todos los actores de la película y con objeto de que la UGT de Actores, CCOO de Actores y Técnicos y la Asociación de Actores (ADA) expusieran los motivos de la solicitud a la Administración de medidas contra la película.En dicha asamblea, Ricardo Palacios (CCOO) expuso que se había solicitado negar la protección estatal a la película porque ésta contaba con actores que no poseían el carnet expedido por el Sindicato Nacional del Espectáculo y que los llamados profesionales no ¡Irán suficientes a juicio del secretariado de actores de CCOO, quien reconoce sólo el carnet nacional, extendido por el sindicato vertical, así como el número excesivo de actores latinoamericanos.

Los firmantes desean aclarar que el acuerdo de exigir el carnet profesional fue posterior al comienzo del rodaje y la contratación de actores. «Ateniéndonos al derecho de Trabajo, manifestamos que la postura enunciada por el Secretaríado de Actores de CCOO es gremialista y contraria al espíritu de una central sindical deniocrática y de clase. La inmensa mayoría de los actores que intervienen en nuestra película es profesional, lo cual fue informado a CCOO de Actores, aunque carezcan del llamado carnet profesional extendido por el sindicato vertical, ya que a varios les fue denegado por motivos extrap.rofesionales y Muy dolorosos para todo demócráta.»

«Ante la posición tomada por dichos sindicatos -añade la nota- manifestamos nuestra más enérgica protesta. La película, por el número de puestos de trabajo, se diferencia de las líneas habituales del cine español. La decisión tomada por UGT de Actores y CCOO de Actores y Técnicos ataca a [a base de toda central sindical de clase, en cuanto que dañaal principio de derecho al trabajo que todos tenemos, adoptando una postura gremialista que nada tiene que ver con un sindicato democrático.»

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