Los vecinos de Vilasantoña denuncian al párroco

La mayor parte de los vecinos de la parroquia de Vilasantoña en el municipio coruñés de Santiso, llevan varios meses sin asistir a misa en la iglesia de su pueblo, debido al enfrentamiento que sostienen desde hace tiempo con el cura párroco, al que acusan de despotismo en el trato con sus feligreses. Según declararon a EL PAIS vecinos de dicha parroquia rural, el cura hizo objeto de malos tratos a varios niños que acudían al catecismo a los que llegó a castigar encerrándoles en cuartos oscuros de la torre de la iglesia o sometiéndoles a actos que los padres consideran vejatorios y de tortura, como obligarles a permanecer de rodillas con las manos bajo las rótulas durante largos períodos de tiempo. En opinión de los vecinos, no atiende las necesidades de la parroquia debidamente, ni siquiera se digna tratar como personas a los feligreses. «Nosotros no estamos contra los curas -dijeron a EL PAIS-, sino lo que queremos es que el obispo nos mande a un párroco que sepa llevarse bien con todos y ayudarnos en lo que pueda. El actual está demostrando que no sabe o no quiere hacer esta labor por lo que exigimos que nos lo cambien.»

Por su parte, el cura opina que detrás de todo esto está la acción política de algunos grupos concretos relacionados con el Bloque Nacional Popular Gallego y que muchos feligreses se sienten coaccionados por la influencia de unos cuantos líderes.