Reticencias del Gobierno ante el proyecto de un grupo español para comercializar gas iraní en Estados Unidos
El Consejo de Ministros tiene que decidir, el próximo miércoles, sobre la concesión de importantes créditos a la exportación y a la construcción de buques, en la operación que la compañía española Crivanis ha montado en Irán, con objeto de vender gas natural de este país a sociedades americanas que comercializan este producto en Estados Unidos. La operación tiene un monto total por valor de 1.200 millones de dólares (más de 100.000 millones, de pesetas), y supondría comprometer créditos oficiales, distribuidos en los próximos cinco años, de una cuantía próxima a los 60.000 millones de pesetas
El proyecto es resultado de los desarrollos tecnológicos de la empresa española de ingeniería Sener en el campo de la construcción de buques de transporte de gas y de plantas de licuefacción de este producto para posibilitar su transporte. Para materializar las investigaciones de Sener se creó la empresa Crinavis, que construye, en el polígono de San Roque, una de las factorías más avanzadas del mundo para la construcción de barcos de transporte de gas licuado y de plantas de producción de energía nuclear. La inversión realizada ya en San Roque es de 5.600 millones de pesetas.Crinavis, al margen de la planta de San Roque, ha desarrollado una actitud comercial e industrial con objeto de crear un grupo de empresas de transporte (Marítima Urdaneta) y comercialización de gas (Hispagás), que cubran el proceso industrial de este producto energético de reciente desarrollo. Al mismo tiempo tomó una participación del 10% en la empresa Kalingás, concesionaria de la explotación de una parte del gas natural del campo Pars, situado en aguas de Irán y calificado como de los más importantes del mundo. En Kalingás, la Compañía Iraní de Gas tiene una participación del 50% y otras sociedades japonesas, americanas y españolas, el resto.
Oferta de Crinavis
Los socios extranjeros de Kalingás tienen el compromiso de poner en marcha la explotación del campo de gas con reservas evaluadas en 1,5 billones de metros cúbicos. En octubre pasado Crinavis presentó a Kalingás una oferta que suponía la adquisición de gas natural, su comercialización y la financiación de estas operaciones, Esto supone: 1. La adquisición, por parte de Kalingás, de una planta marina de licuación de gas, construida por Crinavis, y que tiene un valor de 670 millones de dólares (unos 56.000 millones de pesetas). La operación tendría que estar financiada por un crédito español a la exportación por valor del 90%, a 10 años, con un tipo de interés del 8,5%. 2. La construcción por Astilleros Españoles y Crinavis de cuatro buques para Marítima Urdaneta, que transportarán gas iraní a Estados Unidos, en cumplimiento del contrato de suministro durante 20 años. 3. La compra por parte de Hispangás (filial de Crinavis) a Kalingás del gas producido en los 20 años posteriores a la puesta en funcionamiento de la planta de licuefacción. Y, finalmente, la venta de este gas, incluidos los costes de flete, a la compañía americana Natural Gas Pipeline.La firma de todos los contratos de la operación queda, inicialmente, pendiente de la confirmación de los créditos oficiales a la misma, lo que es competencia del Consejo de Ministros.
Plazos comprometidos
Las posibilidades de realización del proyecto en el que la empresa española ha comprometido ya unos setecientos millones de pesetas, tienen de plazo hasta antes de que finalice el presente mes en el que se celebrará el consejo de Kalingás. Si antes del consejo no se ha conseguido redondear la financiación de la operación ésta resultará inviable. Fuentes autorizadas de la empresa española han manifestado que la reticencia de la Administración constituye una sorpresa después de que los anteriores equipos estimularon el proyecto. Señalan quecaso de que se llevara adelante, por su magnitud, numerosas empresas (Astilleros, Elcano...) tendrían que participar en la operación, con posibilidades sólidas de rentabilidad.Según los cálculos realizados por Crinavis, la operación supodría las siguientes consecuencias: contribución de 128 millones de dólares durante 24 años para equilibrar la balanza de pagos española. El Tesoro ingresaría a lo largo de toda la operación casi 40.000 millones de pesetas. Se generaría, por la construcción de la planta y los tres buques, trabajo equivalente a 43.000 hombres/año, en sectores con problemas tan graves como los que afectan a la construcción naval. Finalmente, la operación potenciaría la presencia española en un sector de punta, en el que hay pocos competidores y que tiene grandes posibilidades de desarrollo, ante el auge que está tomando el mercado internacional de gas. Por otro lado, la materialización de la operación podía permitir el suministro futuro de gas a España, desde Irán.
La no realización de la operación podría comprometer el desarrollo de Crinavis, que ha invertido 5.600 millones en su planta de San Roque (1.700 millones de crédito oficial y el resto créditos o aportaciones de los socios: Sener, Banesto, Bankunión, Liga Financiera y Banco de Vizcaya) y la implantación de una tecnología avanzada de patente española.
Toda la operación fue sometida a la consideración del anterior equipo del Gobierno y ha sido objeto de intensa negociación y estudio con el actual. En las últimas reuniones de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos y de subsecretarios se ha tratado este tema y, según noticias recogidas ayer por EL PAIS, está aún pendiente de estudio y consideración, antes de la reunión gubernamental del miércoles. Inicialmente parece que el Ministerio de Industria ha considerado importante la operación. El de Economía ofrece mayores reparos, ya que considera que las magnitudes de crédito a la exportación que compromete son muy superiores a las disponibilidades reales del país, y agotaría el mismo para otras operaciones en el exterior.
Por otro lado el grupo noruego Moss Rosenberg, con tecnologías similares a las de Sener, mantiene un cerrado codo a codo con la empresa española en este campo. Según recientes informaciones, este grupo tiene compromiso de su Gobierno para disponer de más de 680 millones de dólares de crédito oficial a la exportación si consigue la operación.
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