La corrida de María Pallarés, sustituida por toros de los Pérez

La pretenciosa Feria del Toro, prácticamente acabó el lunes, con los toricos navarros, que no estuvieron mal de presencia. En realidad, la mansedumbre de éstos y la de los concha y sierra del domingo, limita aún más las conclusiones positivas de la feria, pero los organizadores no son responsables de que el ganado salga bueno o malo. Ellos tienen que ofrecer divisas con garantías y toros de trapío. Y este tipo de toros es lo que falta, con la llegada las figuras.La corrida de María Pallarés, rechazada casi toda por los veterinarios, ha sido sustituida con una combinación de reses de Antonio Pérez y de Pérez Angoso. De manera que la feria de San Fermín, que concluye esta tarde, tiene un final de remiendos, que la devalúa. Pero, en realidad, ya estaba devaluada desde el martes, con la pobre presentación y mortecino comportamiento de los osbornes y los torrestrellas. La esperanza queda hoy sólo pendiente del arte de los espadas: Paula, El Viti y Manzanares.