El nuevo Gobiemo israelí consigue la confianza parlamentaria

El nuevo Gobierno de Israel, presidido por Menahem Begin, obtuvo ayer la confianza del Parlamento israelí por 63 votos a favor y 53 en contra, tras un debate que duró ocho horas. Cuatro diputados estuvieron ausentes en la votación. A continuación, prestaron juramento de sus cargos el primer ministro y los otros doce componentes del nuevo Gabinete. Mientras tanto, informaciones árabes señalan que las tropas sirias y jordanas han sido puestas en estado de alerta en las fronteras con Israel.Begin celebró su confirmación como primer ministro con una copa de vino de Burdeos, que ofreció a su predecesor, Isaac Rabin. El nuevo jefe del Gobierno israelí afirmó que había recibido una «carta muy cálida» del presidente de Estados Unidos, Jimmy Carter, en la que le invita a visitar Washington el próximo 18 de julio.

Precisamente ayer llegó a Jerusalén el director de la Oficina de Asistencia Norteamericana, John Gillighan, quien afirmó ser portador de un mensaje personal de Carter y que trataría con el nuevo Gobierno sobre la asistencia de Estados Unidos a Israel. En el aeropuerto declaró a los periodistas que su país «aspira a ver un Israel libre, seguro y en paz con sus vecinos».

La Administración norteamericana intenta, en los últimos días, tranquilizar a los judios norteamericanos y a los estadounidenses amigos de Israel sobre la disposición del presidente Carter hacia Israel. A este respecto, Begin ha declarado el lunes que conseguirá persuadir a la Casa Blanca durante su visita de que el interés norteamericano pasa por el reforzamiento de los lazos de amistad con Israel.

Mientras tanto, los países árabes han acogido con preocupación la instauración de una «Iínea dura» al frente del Estado judío. Radio Damasco afirmó ayer que con Begin «había llegado un terrorista al cargo de primer ministro». Por su parte, el presidente del Parlamento egipcio, Sayed Marei, declaró que la política de colonización de los territorios ocupados propiciada por el Likud, partido de Begin, constituye un obstáculo para la paz en Oriente Próximo. El ministro de Defensa de Líbano, Fuad Butros, manifestó su pesimismo por la situación general de la región.

Movilización árabe

Recientemente, el ministro saudita del Petróleo, jeque Yamani, advirtió que, a menos que los esfuerzos de Estados Unidos por un acuerdo en Oriente Próximo den resultados positivos, «la confrontación en la región sería inevitable».

Noticias procedentes de Kuwait, difundidas por la agencia de prensa de Oriente Próximo MAP, indican que las fuerzas sirias y jordanas estacionadas en las fronteras con Israel se encuentran en estado de alerta, «en una movilización sin precedentes desde la guerra de octubre de 1973». Esta movilización árabe puede estar en relación con los llamamientos a filas de reservistas, efectuados por Israel en los últimos días.

Mientras tanto, el nuevo ministro de Asuntos Exteriores israelí, Moshe Dayán, afirmó ayer que no ve ninguna posibilidad de arreglo en base a concesiones territoriales en Judea y Samaria. Manifestó que concentrará sus esfuerzos en la consecución de un acuerdo general de paz con los árabes y se mostró partidario de la suspensión de lo que define como «estado de beligerancia» de los Estados árabes, a cambio de concesiones territoriales parciales de Israel en los altos del Golán (Siria) y península del Sinaí (Egipto).