La muerte de Francisco Javier Núñez. Su hermano rectifica
En el número del pasado 1 de junio, en la página once, se me alude como autor de unas declaraciones que hice a un redactor de EL PAIS, a propósito de la muerte de mi hermano, Francisco Javier Núñez.Sin estar en desacuerdo con la transcripción de las mismas, quiero hacer las siguientes puntualizaciones:
Primero: a pesar de las declaraciones del secretario general de la comisaría de policía de Bilbao, los hechos que narra EL PAIS sí sucedieron, tanto los del día 15 de mayo como los del del día 17. No comprendo como dicho señor secretario puede afirmar tajantemente que no sucedieron, cuando lo más que puede afirmar es que él no conoce los hechos.
Segundo: Sobre sus afirmaciones de que no ha sido puesta denuncia alguna en ninguna comisarla, no aclara mucho los hechos, puesto que la agresión la sufrió después de salir del Palacio de Justicia, sito en la calle de Berástegui, ignorando por mi parte si llegó o no a ninguna comisaría.
Tercero: Afirmar que su muerte se debió a la cirrosis está tan próxima a la verdad como decir que un diabético, a quien se inyecta glucosa, ha fallecido a causa de la diabetes. No hace falta ser un experto en medicina para saber que una persona que ha sobrellevado la enfermedad durante tanto tiempo y sufre violentas hemorragias, después de sufrir las mencionadas agresiones ha fallecido a causa de las mismas.
Cuarto: No es cierto que el doctor Fariña atendiese a mi hermano durante su estancia en el hospital. Le atendió antes de ingresar en el mismo.
Quinto: Como puntualización, mi hermano permaneció en el hospital durante once días, mientras ustedes mencionan seis días.
